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Ahyeon miraba su reloj desesperada, están en el mismo grupo ¿cómo es posible que se tardé tanto en salir? Sus puños se apretaron cuando lo vió salir junto a otros dos chicos, y los tres parecían reír de algo. Sin embargo su sonrisa se terminó cuando la castaña los enfrentó.

— ¿Qué? ¿Te sientes bien golpeando a una chica que nunca te ha hecho nada? — Ahyeon miraba con molestia a Hyunsuk.

— ¿De qué hablas?

—No te hagas el idiota que bien sabes de lo que estoy hablando o que, ¿ya se te olvidó el balonazo que le diste a Chiquita?

— Ah entiendo, hablas de esa nerd, igual se lo merecía tal vez así se le acomoda el cerebro y s...

Sus palabras fueron silenciadas por un fuerte golpe en su mejilla.

— ¡Que te pasa imbécil!

— No quiero saber que vuelves a intentar hacerle daño.

— ¿Te importa acaso?

— Sí y mucho, de ahora en adelante piensa bien lo que haces porque al único que se le va a acomodar el cerebro es a ti de la golpiza que te voy a dar.

Ahyeon lo tomó de la camisa.

— ¿Me escuchaste?

— Sí.

— También va para ustedes. — Señaló a los otros dos
chicos temerosos.

La pelinegra empujó a Hyunsuk y se sacudió para luego irse de ahí.

— Idiotas...

Al día siguiente

Chiquita de nuevo tenía esos lentes negros y feos mientras esperaba a que la clase comenzará, pero una silueta se colocó frente a ella y con cuidado le quitó los lentes.

— Por favor deja de usar esos feos lentes.

— Pero no tengo otros.

— Pues ahora si los tienes.

Ahyeon sacó un estuche y de ellos unos lentes exactamente iguales a los que el día anterior se le habían roto, con cuidado se los puso y sonrió.

La pelinegra no sólo sonrió de felicidad al ver a la menor feliz por los lentes, también sonrió al ver lo bonita que se veía con ellos, agregando que por primera vez su cabello rubio estaba suelto.

Eres tan bonita.

— Gracias...

— No agradezcas, es lo poco que puedo hacer por todo lo que me ayudaste.

Ahyeon dejó el estuche en la taquilla de Chiquita y se fue a su lugar.

Sin embargo la rubia observó un pequeño papel pegado en el, lo tomó y lo leyó.

"Por favor, cuando la clase termine no te vayas, necesito que hablemos."

Chiquita suspiró, seguramente Ahyeon le pediría sus trabajos otra vez.

La felicidad que había tenido desde el día anterior se había esfumado.

Tonta, Ahyeon sólo se porta bien contigo cuando quiere tus apuntes.

Homework | Chiyeon ᝰDonde viven las historias. Descúbrelo ahora