Capítulo 7 ^♡^

936 166 51
                                    

   Hoseok había seguido muy deprimido todo su fin de semana luego encontrarse con su exnovio, deprimido porque ahora solo sentía una vaga nostalgia de lo que alguna vez habían tenido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

   Hoseok había seguido muy deprimido todo su fin de semana luego encontrarse con su exnovio, deprimido porque ahora solo sentía una vaga nostalgia de lo que alguna vez habían tenido.

Porque revisando los recuerdos guardados en su teléfono celular, fotografías que él mismo había tomado y los pocos mensajes donde no habían peleas ni reclamos, se había dado cuenta de que de lo bueno, solo podía rescatar muy poco.

Taeyong había sido un novio lindo al principio de la relación, pero después, solo algunos días después del comienzo, los problemas habían comenzado, y Hoseok hizo todo lo posible por encargarse de aclarar hasta el motivo de sus suspiros, todo con tal de no hacer molestar a su pareja.

Por supuesto, ni sus padres, ni su mejor amigo, ni otros conocidos, habían estado de acuerdo con su relación, pero Hoseok lo amaba, y no escuchó jamás los consejos para con su noviazgo.

Sin embargo, ese fin de semana recordaba cada palabra de su madre y de Jin, advirtiendo que ese tipo no era de fiar.

Así que estaba sumamente confundido, sobre todo porque aunque pensaba en la relación con su exnovio y ahora estaba en duda sobre regresar con él o no, también había estado pensando mucho en Yoongi. Y eso lo tenía nervioso y muy enredado.

Esperando en la sala de diseño, revisó los mensajes recientes de Taeyong donde le comentaba que deseaba verlo y le proponía la idea de salir juntos a cenar al restaurante favorito de Taeyong, por supuesto.

Y con el teclado activado, sujetando el celular entre sus manos y manteniendo los pulgares al aire a punto de escribir, su mente se bloqueó al no saber qué responder; pero quizás muy en el fondo no quería verlo más, pero todavía no podía aceptarlo.

La puerta fue golpeada suavemente interrumpiendo el mensaje sin escribir, por lo que enseguida dio el permiso de entrar.

Cerró la ventana del chat y dejó el aparato sobre la mesa para llevar de inmediato sus ojos hacia la puerta donde Yoongi entró.

Diez minutos antes de la hora, con mucha puntualidad como era la costumbre del pelinegro.

Y sonriendo ampliamente en automático, Hoseok se levantó de su asiento para recibirlo.

—Buenas tardes, Hobinnie —saludó cerrando la puerta.

—Hola, Yoongi —expresó con mucha más emoción de lo que había esperado, desvaneciendo todas sus preocupaciones y pensamientos sobre Taeyong, enfocándose únicamente en su socio.

—¿Cómo estás, Hoseok? ¿Qué tal el fin de semana? —preguntó en tanto se acercaba al lugar a su lado.

Sin dejar de sonreír, Hoseok lo observó por muy breves instantes, contemplando lo elegante y atractivo que lucía con esos trajes que vestía.

—Ahora definitivamente estoy mejor —respondió sin pensarlo, señalando la silla para que tomara asiento—. Y básicamente estuve en la cama estos días, durmiendo y descansando, ¿y tú?

Ojitos lindos -YoonSeok- (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora