No me lo puedo creer. ¡Por fin es viernes!
Hay dos razones por las que estoy contenta, la primera es porque es viernes y la segunda porque hoy por la noche hemos quedado nuestros hermosos vecinos para ver una peli. Aún no la hemos elegido, pero queremos ver alguna romántica, a ver si acaba pasando algo entre alguno de nosotros. No miento, Lía tiene bastantes ganas de que ocurra algo conmigo y Axel, pero en mi mente sabía que no, que iban a ser ella y Dylan.
Los chicos llegaron a las diez y media, pedimos unas pizzas e hicimos palomitas, mientras tanto, elegimos la película.
Podíamos haber elegido muchas otras, pero optamos por la primera de "A través de mi ventana".
El sofá era lo suficientemente grande como para que nos sentásemos los cinco. Axel se sentó en una esquina del sofá, a su lado Archie, luego yo junto con Lía, y en la otra esquina, al lado de Lía, Dylan.
Ya empezaban bien la noche, sentados juntos en el sofá. Yo tenía razón, iba a acabar pasando algo entre ellos.
Unos minutos después le dije a Archie que me acompañase a por las palomitas, y así lo hizo.
- Sé que piensas lo mismo que yo, Dylan y Lía van a acabar juntos- me dice Archie.
- Seguramente que sí, es que están muy juntos- contesto yo.
Los dos nos reímos y nos encaminamos hacia el salón. De primero llegó Archie, que dejó las palomitas en la mesa y se sentó, ¡en mi sitio!
Le lancé una mirada asesina, ¡me tenía que sentar al lado de Axel!
En el fondo se lo agradecía demasiado, estaba al lado de él, y la verdad es que lo deseaba bastante. La película empezó, digamos que había algunas escenas que bueno, ya estábamos acostumbrados a ver.
Al poco rato nos giramos a ver a Lía y a Dylan. Ya estaban muy pegados y sin querer nos reímos.
- ¿De qué os reís?- preguntó Lía.
- Nada, nada- contestamos Archie, Axel y yo al unísono.
Ellos sospechaban bastante, pero al final se olvidaron. La película transcurría y en un momento Archie me dio un codazo, medio disimulado.
- ¿Qué...?- le pregunté en voz baja, pero ya no acabé la pregunta. Le di otro codazo a Axel, el cual también se giró, pero ya no preguntó nada, los había visto de pleno.
Yo miré a Axel y nos reímos. Tenía una sonrisa preciosa. Me estaba muriendo de amor por dentro.
Luego miré a Archie, que me puso una cara para que le agradeciera lo el cambio de sitio.
Continuamos mirando el espectáculo, Lía y Dylan se estaban besando. La película se quedó de fondo. Ellos no se habían dado cuenta de que los estábamos mirando.
Al poco rato pararon y nos vieron. No habíamos disimulado nada, pero absolutamente nada. Lía se sonrojó y Dylan se escondió un poco. Más o menos en mitad de la peli Dylan cogió a Lía de la mano y se fueron.
- Ya volveremos, vosotros seguid viendo la película- dijo Dylan un poco alegre.
Cuando desaparecieron por la puerta nos comenzamos a reír. Ya sabíamos lo que iba a pasar, pero continuamos viendo la película. No mucho más tarde comenzamos a escuchar los golpes del cabecero contra la pared. No podíamos parar de reírnos, no sabíamos por qué, pero nos moríamos de la risa.
-Me voy a asomar, pero no voy a abrir la puerta- dijo Archie.
- ¡No se te ocurra!- le dije yo,- ¿estás loco?
-Vale, pues no me acerco mucho, pero voy a ir- dijo, con una sonrisita para darme pena.
Me rendí y no le insistí más, Axel, digamos que tampoco ayudó muchísimo, sino que se reía de la situación.
Cuando Archie desapareció por la puerta recordé una cosa.
-Mierda- dije.
- ¿Qué pasa?- me preguntó Axel.
- Lía, no me ha pedido los condones, estaban en mi habitación, supongo que ha ido a por ellos, pero me está preocupando.
- Yo creo que sí que ha ido, si no supongo que tendría Dylan, que siempre lleva uno a todos sitios- me dijo.
- Menos mal, es que no quiero que se quede embarazada, ella tampoco quiere, o sea, si, pero más tarde- dije, todavía preocupada.
- No te preocupes, yo creo que está todo bien- me dijo para tranquilizarme.
De repente comenzamos a oír los gemidos y nos reímos mucho, y apareció Archie por la puerta para acompañarnos en esas risas.
Los sonidos cesaron y la película ya se había acabado. No nos la habíamos acabado de ver, pero lo que importaba ahora era lo que iba a pasar, que iban a hacer ellos.
- No sé si os habéis dado cuenta, pero, ¿en qué momento hablaron de irse a la habitación?- preguntó Archie.
- Es verdad, no han hablado gran cosa, únicamente que lo hiciesen en voz baja- dijo Axel.
Yo simplemente asentí, pensativa, pero lo que en ese momento me importaba era la felicidad que sentiría Lía por dentro.
Las horas pasaban y ya eran casi la una de la madrugada. Yo tenía mucho sueño, pero intenté no dormirme, pero no lo conseguí. Me había quedado frita, y en el hombro de Axel.
Archie me sacó fotos y a la media hora me despertaron. Axel estaba cómodo, no le había importado, a mí sinceramente tampoco, tampoco es que me hubiese enterado.
Archie me enseñó las fotos y yo le pegué. No fue hasta ese momento en el que me di cuenta de que en el salón estábamos los mismos de antes, porque solo había escuchado la risa de Axel y las quejas de Archie.
Ya no se escuchaba ningún tipo de ruido, así que decidí asomarme a la habitación. Pensaba que iba sola, pero cuando me giré tenía a los dos cotillas detrás de mí mirando a la habitación. Nos los habíamos encontrado dormidos, abrazados.
-Estos dos ya son novios oficialmente, ya verás mañana- dijo Archie.
Cerramos la puerta y decidimos qué hacer. Tuvimos en cuenta que al día siguiente no había clase. Solo había que hacer dos ejercicios de mates. Finalmente, decidimos que se iban a dormir ellos a su casa, Dylan se quedaba aquí y ellos por la mañana bajaban y hacíamos los deberes todos juntos.
Axel le mandó un mensaje al móvil de Dylan para que cuando por la mañana mirase el móvil lo supiese, pero no se escuchó el sonido de la notificación.
- Siempre lo tiene en silencio- confirmó Archie.
Nos dispusimos a recoger todo lo del salón, yo les insistí en que lo hacía yo sola, pero se negaron a irse sin ayudarme.
-Gracias- le dije cuando terminamos- y hasta mañana, cuando bajéis me mandáis un mensaje.
Los dos se despidieron de mí con un abrazo. Cuando cerré la puerta me alegré demasiado, Axel me había dado un abrazo. Me moría, de verdad. Al rato me llegó un mensaje de Axel que decía que ya estaban en casa. Yo les dije que vale, que yo me iba a dormir y me contestó con un mensaje de buenas noches, ¡y un corazón! Estaba demasiado contenta. Simplemente, le puse un igualmente y otro corazón y me preparé para irme a dormir.
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Los mejores meses de mi vida
Teen FictionUna universidad nueva. Molly como siempre enamorada Axel, el popular Que posibilidad hay de que esten juntos?? Saga Meses