CURAME|||JONATHAN CRANE

cap 3

-Gracias por recibirme, se que quizá debió ser extraña mi llamada de ayer- estreche su mano y la aleje de el suavemente

La había visto pasar a su consultorio la chica desde la perspectiva de crane, era muy nerviosa, curiosa por el lugar, parecía insegura de sí misma, y cubria su cuerpo en su mayoría, parecía no esforzarse en verse bien y aun asi lo hacía, se veía bonita, aunque para ser sinceros se veía algo demacrada, "no come" pensó crane de inmediato analizando desde su lenguaje corporal y todo en ella en si, cuando estrecho la mano de _____, noto lo delgada que estaba, asintió despreocupado por las palabras de la joven.

-descuida no sería la primera vez que un paciente me llama a esa hora- comentó tratando de que se sintiera más cómoda

-aún así debí esperar a una hora más adecuada-

-descuida- se ajusto sus lentes y hizo algunos apuntes en algunos papeles- tu nombre completo es?

-______ Miller- conteste moviendo mi pierna con nerviosismo

Le molestaba ese movimiento de pierna de ella, estuvo tentado a agarrar su pierna para que dejara de hacerlo, pero no debia concentrarse, aunque sus cejas se fruncieron ligeramente - tu edad es?- dijo tratando de ignorar su reciente irritación, aunque su semblante se mantenia inquebrantable

- 21 años- susurre- los cumplí hace pocos meses-

-bien- asintió crane dejando su pluma a un lado, cruzo sus manos y la miro directamente a los ojos- anoche en la llamada mencionaste que tenias miedo? Precisamente a que?

me removi incomoda y desvié la mirada de el, la intensidad de sus ojos azules era demasiada-solo... no se si estoy preparada para hablar de ello todavia-trague saliva

-seré paciente al respecto- respiro profundamente- desde cuando tuviste ese miedo?-

- 17 años...- conteste era imposible olvidar esa fecha, seguía sin mirarlo, podía simplemente irme de ahí cierto?- en mi cumpleaños...

-paso un evento el día de tu cumpleaños que te hizo experimentar miedo y repulsión cada vez que un hombre te mira o dice cosas obscenas sobre ti o tu cuerpo?-inquirió con cautela.

- yo... s..si -aprete mis labios con fuerza- no quiero hablar de eso

-tenemos que hablarlo- contesto seriamente - si quieres mejorar tenemos que hablarlo

-porfavor no- mi voz se quebro ligeramente

-mirame _____- vacile un poco pero al final lo mire, el vio las lágrimas que se empezaban a formar en mis ojos- esta bien no lo hablaremos.... hoy al menos

- gracias...-baje la mirada viendo mis muslos, volvía a ser débil, que patetica era-

La miro fijamente consiente de lo que cruzaba por su mente-fue valiente que vinieras aquí hoy- su mandibula se tenso un breve momento- quiero decir el simple echo que hubieras venido mucho no lo hacen... deberías estar orgullosa de ti misma

Alze la mirada y cerre los ojos un momento dios... que manera de ver las cosas- gracias- sentí que por un momento pude respirar

-y bastante agradecida- sonrio y no pude evitar devolverle la sonrisa- bueno- carraspeo- nos veremos en la próxima sesión _____ cuídate de regreso a casa.

-hasta luego- dije saliendo del consultorio, cuando sali a la calle aun me sentia mal en varios aspectos, pero era la primera vez que me habría tanto con alguien y parecia recuperar un poquito de quien era antes- solo mejora- dije para mi misma caminando hacia mi trabajo.

Al llegar al bar parece que yo era diferente o al menos fue lo que lucas dijo.

- parece que paso algo bueno, ahora no tienes cara de querer morirte- bromeo un pico

-supongo que lo es... si paso algo bueno-sonrei brevemente pero fue sincero.

-algo demasiado bueno creo yo..-susurro lucas al ver aquella sonrisita en los labios de ella- si sonries así... -se quedó callado casi perdido en su mente o más bien en su rostro

-te hize caso y fui con el psiquiatra que me recomendaste, hoy fue nuestra primera sesión... y quiero creer que voy a mejorar- dije entregándole al señor sanderson su vaso de whisky.

-eso suena maravilloso- su aliento se quedó atrapado en su garganta-

-Lucas ponte a trabajar-lo reprendió nuestro jefe y ____ solto una risita a sus adentros

-que va a llevar?- alze la vista y vi a Marcus mi dia se habia arruinado automáticamente aun recordaba sus palabras del otro dia-

-pero mira que tenemos aqui, creo que he ganado el premio mayor-
Me guiño un ojo- preparame lo más fuerte que tengas bonita-

No conteste a sus provocaciones y solo le di lo que pidio su bebida-ahí tienes-

- Esto es lo más fuerte? Me decepcionas hermosa... creo que tienes algo más que darme- dijo con obvias dobles intenciones

-Quizá quieras una patada fuera de mi bar- mi jefe lo interrumpio- esas si que son fuertes- sonrio burlon

-no hablaba con usted señor- resoplo y se alejo de la barra con su bebida molesto.

- Gracias- susurre enfocandome en los otros clientes

- no hay de que medio metro- respondió mi jefe

El era alguien mayor pero si lo podría definir en una palabra paternal... seria esa... aunque nunca faltaban sus apodos "medio metro" que gracioso don Antonio...

Mientras limpiaba las mesas del bar, note que un chico se me acercó y me toco el hombro, me estremeci por la incomodidad del simple toque

-paso algo?- dije con voz tranquila a pesar de mi disgusto anterior

-Oye la verdad es que me pareció te muy linda... y no se si podrías darme tu número de teléfono ya sabes solo para charlar y conocernos- el chico tenia las mejillas sonrojada parecía avergonzado

-no puedo, lo siento, estoy en el trabajo- conteste mientras recogía los vasos sucios colocándole en la charola

- vamos... solo es tu numero- insistió

-no quiero- susurre y me aleje de el con los cubiertos en la charola, lo escuche quejarse

-pinché apretada- para que luego se fuera con sus amigos los cuales parecieron hacerle burla, gracias a dios que lo rechaze.

Al salir del bar camine de regreso a casa, pero escuche a un par de borrachos atras de mi, mire sobre mi hombro y era el mismo chico que me había pedido mi número hace rato, solo camine más rápido para alejarme del lugar.

- ay vamos amor vas a correr?- lo escuche burlarse a el y a sus amigos-solo queremos divertirnos un rato contigo.

No conteste ni los mire solo seguí caminando casi corriendo, un ataque de pánico empezó a apoderarse de mi, hasta que llegué a una tienda cercana, me recargue contra un dispensador de refrescos y tome mi teléfono marcando su número rápidamente.