Solo necesite una pizca de tu mirada, una gota de tu atención y un poco de tu voz para crear mi posición de amorˏˋ°•*⁀➷
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ──Pov Alondra
Solo una cosa necesitaba, su mirada posada en mí, desgraciadamente no lo estaba, él se encontraba con mi amiga, con Ivanna, susurrandose cosas a oído mientras yo hablaba con David
—Y mi papá me va a comprar un coche —terminó de decir con una sonrisa
—Pues cuando lo tengas ahí me llevas a dar una vuelta —Conteste con poco interés mirando a Rafael
La cercanía entre él e Ivanna me causa escalofríos en la piel, estaban tan cerca que si uno movía un poco su rostro con facilidad se besaban.
El timbre sonó, me di vuelta para caminar, decidí esperar a mis amigas, Monse se puso a mi lado, volteando un poco mi cuello visualice a Ivanna todavía cerca de Rafael, mi corazón latió Muy lento, como si quisiera dejar de latir un momento
—¿Vamos o la esperamos? —preguntó Monse caminando un poco
—Vámonos, por favor —salió de mi boca una voz hecha un hilo intentando no romperse
Ella miró atrás y luego a mí, entendiendo la situación, ambas caminamos y nos sentamos, Ivanna no tardo en subir y se acercó rápido hacia nosotros
—Adivinen que me dijo el negro —susurro
—No le digas así —dije en tono autoritario
—Como sea, adivina... —nos movió la mano indicando que nos acercamos —. Me preguntó si Alondra y el conta eran novios —susurró
—¿El conta? —pregunte mirándola confundida —. Ah, David —caí en cuanta dentro de unos minutos bajo la mirada de Ivanna que me transmitía un "estás pendeja"
Ellas seguían hablando mientras mis ojos se dirigían a él, quién apenas había entrado al salón, su mirada sería, pero su cara cambió al ver a Osvaldo, su sonrisa apareció y sin dudarlo se acercó a él, en momentos como ese deseo ser Osvaldo, deseo que un día Rafael se acerque, me saque plática, se ría conmigo y no de mí.
Su mirada se dirigió hacia a mí mientras Osvaldo le decía algo, me dedicó una ligera sonrisa, tan linda y natural, las pulseras que traía en sus muñecas resaltan el café de su piel, las pequeñas venas que se marcaban resaltando más su piel morena, mis ojos se dirigieron a sus brazos posándose en el lugar donde resaltaba sus penas, el apretó su muñeca con su otra mano y no se que mas hizo pero sus venas se veían aún más, al verlo a los ojos me miraba serio, una mezcla entre enojado y divertido, después de unos minutos que parecieron eternidad me rodó los ojos y se sentó en su lugar, yo salí de mi trance e imite su acción mientras me metia a la plática de mis amigas.
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Si existiera un nosotros
RomansaLo más doloroso es cuando aceptas que esa persona que quieres a tu lado jamás te amara y no sera tú amor, nunca. Uno se cansa de perseguir a una persona que no te busca y que jamas lo hará, podemos fantasear con esa persona, fantasear que nos ve com...