#19🔞

546 34 10
                                    

— Agh, creo que comí mucho — se quejó Spreen al salir de la casa de sus padres.

Se había hecho de noche, Shadoune había pasado con éxito la fase de preguntas por parte de su suegro y cuñado y con honores la parte de caerle bien a su suegra.

Shadoune junto a su suegra habían hecho un pastel (más que todo para demostrar los dotes de repostería del alfa) y bueno, habían hecho fiesta con ello.

— Solo quiero llegar a casa y dormir por tres mil años — dijo Spreen mientras se recostaba en el hombro del alfa.

Siguieron hablando mientras llegaban a la casa del alfa cuando notó como de la frente de Shadoune corrían varias gotas de sudor y las feromonas de este se habían vuelto más intensas, además de notar como el alfa apretaba el volante.

— Shad, ¿te sientes mal? — preguntó mientras ponía una mano en su frente—. Tu celo — intuyó.

— L-Lo olvidé por completo — dijo mientras intentaba no ceder a su lobo quien reclamaba por el omega—. te llevaré a tu casa.

— No — contestó con rapidez el azabache.

Shadoune estacionó el carro a un lado de la calle para mirar a Spreen.

— No quiero que te sientes presionado, amor.

— Quiero ayudarte — puso una mano en la pierna del alfa—. Déjame ayudarte.

— Mi celo es diferente al tuyo, no sé si podré contenerme — advirtió tratando de evitar que la pequeña mano de su novio no subiera más de la cuenta.

— ¿Yo en algún momento dije que te contuvieras?

Shadoune se mordió el labio inferior, el omega se mostraba muy decidido y eso no estaba ayudando para nada a su lado racional.

— Amor, en serio, yo...

— Gabriel Shadoune Marolt Perez — lo llamó por su nombre completo haciendo que el alfa se callara en seco—. No me estás obligando a nada, he leído sobre el celo de los alfas, estoy seguro y consciente de lo que estoy haciendo, además, sé que no me vas lastimar.

— Spreen, es probable de que no sea mi lado racional el que actúe, ¿qué tal si te lastimo? O si tal vez hago algo que no te guste, o también... — el omega tomó el rostro del alfa entre sus manos llamando su atención.

— ¿Quieres que pase tu celo contigo?

— Sí — respondió con rapidez.

— Entonces, si ambos queremos, ¿qué te detiene?

El alfa desvió la mirada, inseguro.

— No quiero lastimarte — repitió.

— Y no lo harás — acarició con ternura las mejillas levemente sonrojadas—. Sé que jamás me dañarías.

El pelinegro volvió a dirigir la mirada a los ojos color violeta del omega, notando seguridad y calidez en ellos.

— Te amo — dijo Shadoune en un susurro audible para el azabache por la cercanía, este le sonrió con cariño.

— Yo también te amo.

☕️

Entraron a la casa entre besos, Spreen recostándose en la mesa que había entrado tumbando algunas cosas sobre ella.

Era domingo, el día en el que los empleados de la casa no iban a trabajar, así que tenían la casa sola para ellos dos.

Los chasquidos resonaban por la silenciosa casa, Shadoune fue bajando sus besos por la mandíbula y cuello del omega sacándole pequeños gemidos.

Ice coffee - Shadreen [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora