Ⅱ. bad tatto

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Habían pasado 5 meses desde que él la dejo, desde que se fue sin explicación alguna, sin motivos. Desde que una parte de su alma murió. 5 meses desde que Callum la dejó. Sabia que sonaba dramática y más para ser solo una joven de veintidos años que tenía una vida por delante, sabía que debería de estar en alguna fiesta con sus amigas y riéndose de sus estupidos exs pero no era el caso. No cuando se trataba de él.

Y ella lo sabía.

Los sabía.

Joder si lo sabia.

Y a pesar de que lo sabía no podía evitar seguir esperando como un perro a su dueño en la puerta, esperando a que volviese, o seguir buscándole con la mirada en cada maldita multitud.

Los primeros meses pensó que esto sería duradero, por mucho que en el fondo supiera que no sería asi, no cuando se trataba de él. La perosna con la que se había imaginado una vida, cuando había sido la única persona que la había enseñado a amar, a sentir algo.

Al tercer mes de sentirse sin ganas de existir más, había renunciado a la espernza que daba la frase "el tiempo cura tus heridas".
Mentira. Mentira. Mentira.
Todo mentiras, el tiempo no curaba ni una mierda, solo te obligaba a aprender a vivir con tu dolor.

La vida había seguido, de alguna manera había seguido llendo a trabajas y había continuado con la universiad, pero eso no quitaba que cada rato libre que tuviera en el día o noche estuviera tirada en la cama sin motivación, dando vueltas y vueltas en su miseria, llorando cada segundo que dejaba de tener algo productivo que hacer y con la mirada perdida en el mismo punto de la habitación en el que había puesto los ojos la primera noche sin él.

Había semana en las que todavía no podía salir de la cama por el dolor que sentía.

Lo había intentado llamarlo, una y otra vez. pero Callum nunca respondía sus llamadas, ni sus mensajes, siempre que lo intentaba salia aquella voz que se habia quedado estancada en su cabeza diciendo "este número no esta disponible o esta bloqueado"

No entendia por que se habia ido, por que ese viernes cuando habia llegado a su apartamento donde supuestamente él la estaba esperando para hacer un finde de maratón de harry potter los dos juntos, se lo habia encontrado con una bolsa con todas sus pertenencias que tenia en su apartamento y se habia ido a pesar de sus preguntas, a pesar de las lágrimas que caian por su cara, por sus gritos y suplicas de desesperación que habían salido de ella.

"Por favor... Callum, por favor... no me dejes, por favor... yo... por favor Callum, ¿que ha pasado? Callum..."

152 dias desde que había dejado de dormir bien. No desde que él se habia ido, no habia vuelto a haber paz en su cabeza desde que él cogió todo su amor y se fue con él,  dejándola andando en el mundo con el corazón y alma rota.

Empezaba a creer que se estaba muriendo, ¿sería verdad que alguien podría morirse de amor? ¿tan trágico que su corazón para de latir teniendo en cuenta que ya no tenía razones para ello?

Deseaba poder borrar todos los lugares a los que fueron, porque no podía ir a ningún lado sin pensar en él

Dejo pedazos de él con ella, y no podia borrar los recuerdos, como si fuera una mancha en su corazón que no podia quitar, como un mal tatuaje.

Y a pesar de todo no podia entender, bueno, no podia evitar peguntarse si Callum no la extrañaba a ella como ella lo estaba extrañando a él ¿podría él seguir con su vida sin tener que forzarse a salir de la cama cada mañana? ¿O forzarse si quiera a comer algo para evitar el desmayo que la amenazaba cada vez que se pasaba días sin comer? ¿También tenía él la esperanza de volver en algún  momento?

¿La odiaria ahora?

152 días que llevaba limpia de él. O eso era una manera de verlo si quería superarlo. ¿Pero realmente quería superarlo? No tenía respuesta a eso. Estancada todavía en el ellos del pasado, con el corazón sangrando, Rayla volvió a dar la vuelta en la cama de la que llevaba sin salir 4 días, no había comido ni bebido, solo había llorado. A este paso no sabía cómo su cuerpo todavía tenía lágrimas para derramar, pero supuso que siempre tendría lágrimas para derramar cuando se trataba de Callum.

Tenia la voz ronca de haber gritado en sus sollozos. Le dolía de toda las veces que lo había hecho.

"Da igual, tampoco es que tenga sentido hablar de nada" Pensó para si misma mientras miraba con ojos vacíos ese punto de la habitación que se había convertido en su punto de mira.

—¿Rayla? — Reconoció la voz. Pero no era la que quería oír. La que ansiaba volver a oír.

—Rayla... ¿cuanto tiempo llevas ahí? —Dijo la voz desde la puerta de su cuarto, dejando entrar atisbos de luz del pasillo, era la primera vez que Rayla veía algo de luz desde hace 4 días. — Vamos Rayla, tienes que levantarte y salir un rato.

Nyx se acercó a su cama y se acuclilló para quedar frente a ella. La preocupación palpable en sus ojos.

—¿Has comido algo?

No respondió, ni siquiera la miró, ni apartó los ojos del punto de la pared.

—Ufff, iré a hacerte algo de comer y luego te daré una ducha. —Dijo su amiga exasperada. No era la primera vez que Nyx se presentaba en su apartamento y la encontraba en ese estado, en trance como decía su amiga. Un trance que duraba días o semanas y hacía que ella dejara de responder al teléfono por lo que su amiga preocupada iba a su piso a ver cómo estaba para encontrarla en ese estado.

Tampoco era la primera vez que tenía que alimentarla o la sacaba a cuestas de la cama para que le diera el aire o darle una rápida ducha. Y todo mientras ella seguía con la mirada perdida y su mente estaba ausente de la realidad, perdida de en los recuerdos donde estaba feliz con él.

"Da igual lo que pase, no merece la pena" Pensó cuando volvió a oír a Nyx decirle que si no comía se moriría.

Definitivamente alguien podía morirse por un corazón roto. Y Rayla lo sentía.

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⏰ Última actualización: Oct 31 ⏰

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Remember that night  {rayllum}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora