Mis Cachorros

Si era Niña.

Han pasado siete años y después de tanto tiempo, empiezo a sentir algo extraño.
De repente se quitó el apetito y nada me parecía bonito.
Todo me desagradaba y es que estaba embarazada.
¡Que alegría! Ahora sí que viene la niña mía.
Y así fue, le pedí mucho a la Virgen para que hembra fuera.
Y después de ocho meses de larga espera, un último eco, grata sorpresa me diera.
Y es que así es ella, siempre haciéndose esperar, siempre poniéndose bella.
No podía salir en las ecografías si no estaba lista todavía.
Nació en abril, cuando realmente para mayo la esperaba. Y nos puso a correr porque el nombre le faltaba.
Pues y que iba a ser varón y Alomar se llamaba. Noooo, le dije a su papá, que ni loca le pondría a una hija mía, un nombre sin simpatía.
Pero gracias a Dios fue muchacha y con elegancia lleva por nombre Brenda Natasha.
Blanca como la nieve, hermosa, delicada, fue la nena más tranquila que madre alguna imaginara.
Inteligente, responsable, en poco tiempo ha alcanzado grandes metas.
Ya esta graduada, no esperaba menos de mi más bella amargada.
Es hermosa y coqueta la mejor hija de este planeta.
Es mi amiga, confidente y para ponernos al día un café está presente.
Amo tanto a esta niña que vivir sin ella no podría.
Se que esto ya lo sabes, que tú madre te ama tanto que siempre estás en mis planes.
El tiempo pasará inevitablemente pero recuerda que allí estaré presente.
Y cuando dormida te quedes en sueño te recordaré sutilmente, que debes quitarte los lentes.