Capítulo 1

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Tokyo, Shinjuku.
Así se llamaba el sitio donde vivías en Japón, naciste en un pueblo lleno de vida, teniendo una vida medianamente normal sin embargo siempre tomabas tu vida con mucha indiferencia.

Eso no quiere decir que has tenido momentos alegres, entretenidos y juguetones. Te has criado en una familia estricta donde la obediencia es vital en ese sitio, sino eres obediente recibias un castigo. Pero esto no duró mucho ya que cuando empezaste a ser adolescente entendiste mucho lo que es obedecer así que ya no era necesario castigarte, sin embargo tenías una actitud muy rebelde por decir lo menos, eras muy caprichosa y cuando te molestabas(casi siempre) eras muy irrespetuosa...

Y lo sigues siendo.
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Ahora tenías 23 años, estabas en tu casa colgando la ropa y mantas, la mayoría eran kimonos, mantas para el invierno y demás, estabas en compañía de tus vecinas que son amigas de tu infancia que tienen casi tu misma edad.

- Terminaré rápido en colgar la ropa para encontrarme con Riku-Decía una de las tres chicas en el sitio, tenía un pelo corto rubio liso era baja con ojos verdes, Riku era su comprometido.

- Yo más tarde tendré una cena familiar con mi esposo- Decía la otra chica con cabellera larga y lisa de color castaño, con ojos azules.

-¿De dónde tienen tanto tiempo? Yo tengo que ir a la cosecha de la familia de mi esposo para esta nueva primavera- Interrumpía la más alta de todas y la mayor con un cabello rizado café claro y ojos de color café.

Si, dos tenían esposos y una estaba comprometida, estabas acostumbrada a escuchar estas charlas así que hacías lo tuyo mientras escuchabas en silencio.
Nunca te intereso esto lo del matrimonio es por ello que eras la única sin un comprometido o un esposo, apesar de que tus amigas te dijeran cosas como: "Ve y enamorate!" Nunca has hecho el mínimo esfuerzo en hacerlo, tenías la edad que normalmente en ese pueblo se tendrían que casar pero tu ignorabas este hecho.

Pensabas que estabas libre de ello...pensabas.

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Entraste a tu hogar, bastante amplio y acogedor, tu familia no era ni rica ni pobre, agradecias un poco por ello, apesar de que nunca tuviste buena relación con ellos, menos con tus padres.

Subiste las escaleras y entraste a tu habitación, te tomaste un tiempo para asearte luego te arreglaste un poco y te pusiste un kimono blanco normal.

Después de un tiempo, escuchaste unas voces, señal de que tus padres habían llegado, lo ignoraste de acostumbre pero frunciste el ceño una vez que escuchaste que te llamaron.

- _____ baja ahora!

De malagana dejaste lo que estabas haciendo y saliste de tu habitación para bajar por las escaleras, con la cabeza te asomaste un poco mirando hacia la cocina, tu padre en el comedor y tu madre en la cocina sirviendo comida.

Sabías que no te habían llamado para almorzar, lo sabías muy bien.

Te acercaste al comedor y tomaste asiento en frente de tu padre.
Tu padre no te miraba estaba tomando un té en ese momento, a lo que te dieron más ganas de fruncir el ceño.

《RYOMEN SUKUNA x LECTORA》Destinada Para TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora