The moon is beautiful, isn't it? - PERCY JACKSON

nine

—No vamos a estar adelante mucho tiempo—Dijo Grover, los chicos se encontraban escapando del monstruo que había soltado Equidna.

—No hace falta—Dijo Annabeth—Tenemos que escondernos en algún lugar.

—Un refugio—Dijo el rubio.—¿Alguna idea de donde puede haber uno?

—Hay uno, un santuario, dedicado a Atenea—Dijo Annabeth—Hecho por uno de sus hijos hace mucho tiempo.

—¿Hay un templo de Atenea oculto a plena vista en medio del centro de San Luis?—Pregunto Grover.

—Si bueno... no creo que este tan oculto— dijo Lizzie señalando arco gigante.

Los chicos caminaron hacia allá, pasando por una fuente.

—Mide ciento noventa y dos metros de ancho y ciento noventa y dos metros de alto, ni mas ni menos centímetros —Decía Annabeth, Lizzie se pudo dar cuenta de lo mucho que a la castaña le interesaban eso temas de arquitectura y mas si se trataba de su madre, Atenea—No tiene soporte interno, cada lado es sostenido a la perfección por el otro. El arco se sostiene por simetría, por matemáticas.

Los chicos entraron encontrándose con mucha gente que estaba visitando el lugar y admirando todo al rededor. Lizzie estaba asombrada por tan increíble lugar, merecido de Atenea.

—Y resiste a los terremotos, así que Poseidon no puede arruinarlo—Dijo Annabeth terminando su descripción del lugar.

—Bien...—Dijo Percy incomodo.

—Disculpa..—Dijo Lizzie pasando por la gente.

—Así es como le demuestras a Atenea tu amor—Dijo Annabeth—Un monumento al poder de la perfección.

—También abarca otras cosas...—Dijo Grover mirando esqueletos de animales siendo enseñadas como si fueran trofeos. Tanto el como Lizzie se sentían asqueados por tal atrocidad.

—Te refieres a lo que algunos humanos quieren que signifique—Le replico Annabeth a Grover—Yo me refiero a lo que en realidad es.

—Como sea... Aquí estamos a salvo, ¿no?

—Los monstruos no entran, ni siquiera Equidna, es seguro.

—Eso... bueno ya que el tren exploto, ire a ver si hay otro en el que podamos seguir. No podemos quedarnos para siempre.—En eso Grover vio una imagen de gente matando toros y caballos.—Que seas una presa no significa que no haya esperanza—Y se alejo.

—No le gusta que se metan con los animales—Dijo Lizzie—a mi tampoco...

—Si, ya se—Dijo Annabeth arrepentida—No tenia que enojarme, es que... lo se.

—Bueno... ¿Es el lugar de tu mamá?—Dijo Percy cambiando el tema y Elizabeth lo vio mas detenidamente encontrándose con el chico pálido y con cara de enfermo.—¿Estará cerca?

Annabeth no contesto.

—Voy enseguida, tengo que ir al baño.—Dijo Percy con voz fingida de mujer haciendo que las chicas lo miraran con cara divertida. Percy volteo para todos lados haciéndose el que no había echo nada.

—Lindo...—Dijo Annabeth.

—Tengo un Don—Dijo Percy, Annabeth sonrió y Lizzie vio como estos al fin ya se estaban llevando bien—Creo que tenis razón, teníamos que ir a un refugio y tu mamá tenia uno. Que suerte que estuviéramos en la ciudad indicada.

—¿Suerte o destino?—Pregunto Annabeth, empezó a moverse con las manos en los bolsillos—Se que crees que todo esta en mi mente, que me digo que mi madre le intereso porque es mas fácil así.