Esto no es lujuria Ozzie x Fizz [cambio de género]

¿Que es lo que ocultas?

°

°

°

°

°

°

°

°

En el anillo de la lujuria;

Cada vez más el pentagrama del infierno se hacía más oscuro, claro, en diferentes anillos era diferente el oscurecer, en lujuria se hacía más oscuro asta llegar a un color azul oscuro que tornan las nubes en lo alto y lo único que se resaltaba entre esa capa de gas oscuro que se miraba tan suave, era el luminoso pentagrama de color azul más claro casi celeste, algo que se puede tomar muy atractivo y aún más en una noche en lujuria para todos aquellos demonios o pecadores que buscan un poco de diversión esa noche y desenvolver sus más sucios, oscuros y carnales deseos.

¿No suena tan mal cierto?

  

Pues esa idea era dominada por la mente e excitación de los demonios que esperaban a que el mismísimo pecado de la lujuria abriera las puertas de su mansión, que era amada por muchos por supuesto.

Solo que... había un pequeño problema, algo que muchos no sabían era que el pecado estaba pensando de todo menos tener relaciones con aquellos que esperan impacientes a las afuera de su hogar con mentes y deseos depravados, Amadeus solo deseaba una sola cosa esa noche.

El pecado estaba enfrente de aquella gran ventana, era la que quedaba detrás de su escritorio, podía ver como demonios y pecadores estaban juntos en está hermosa noche, algunos rentaban molestes exclusivos para tener una noche llena de aventuras sorprendentes, la mayoría de echo rentaban cuartos para ello, pero solo una pareja entre el montón llamo su atención, era una pareja de diablillos o mejor dicho de "IMPS", ambos estaban vestidos con ropa elegante y no como todos que utilizaban ropa explícita, parecían que estaban en una cita.

El pecado siguió con la mirada a la pareja y observando los detalles, estos iban de la mano mientras compartían miradas y hablaban entre ellos, era... Era algo lindo de ver al decir verdad. Lujuria sonrió con los labios al ver a eso dos enamorados, su cara que antes expresaba seriedad y preocupación se comenzó a suavizar a una mirada dulce.

Pero en eso un sentimiento se interpuso en esa emoción, sacudió la cabeza, la mirada que tenía se convirtió a una enfadada y con repugnancia se alejo del cristal y se sentó en la mesa de su escritorio dando espalda a la vista que tenía al frente de ella.

—Maldición... ¿Que está pasando conmigo últimamente?, Ya no soy la misma desde... Desde que... Que ese bufón llegó aquí— se levantó de el escritorio y camino lentamente por el gran pasillo que daba a la salida de ese cuarto —Se que cada vez que estoy con Fizz... Todo se vuelve tan... Tan bien y lo peor es de que no solo en la cama, literalmente me siento libre cada vez que estoy con ella y... me encanta que sea así, nunca me había sentido de esta manera, siempre que quiero estar con alguien pero sin ninguna relación amorosa en medio y por lo que puedo ver, con Fizz no pasa nada de esos asqueroso problemas, pero aún así se que es arriesgado...—

Se detuvo al tener la puerta delante de ella, levantó su mano para abrir la solo que se detuvo en el proceso, dejando la mano en la manilla y su mirada baja —Pero sin embargo... no puedo evitar el sentimiento de que ella esté lejos de mi... y que este en ese anillo con esa maldita perra codiciosa, ella es tan... se ve frágil y adoro su forma de ser y dedo de admitir que me da gracia verla intentar hacerme reír y al final siempre obtiene los resultados esperados...— levantó la mirada —Pero odio que eso tenga que ser forzado al igual que su sonrisa, quisiera averiguar qué es lo que ese bufón está ocultando me...— y siguió con su acción en abrir la puerta y poder salir.