Teenage parents | Yoonmin

Extra #01

1 año después

Ha pasado un largo año desde que el cachorro llegó a sus vidas y no fue para "arruinarlo", fue para llenarla de alegría. Los padres de Yoongi y de Jimin, amaban a aquel niño con cabello rubio, algunos rulos y con ojitos de gatito, adorable en todo sentido.

La madre de Yoongi, Jihyo terminó por aceptar a Jimin como omega de Yoongi, aunque no hablaban casi, ya sentía un poco de cariño a Jimin y claro que amaba a su nieto.
Era 5 de diciembre, el cumpleaños de su pequeño bebé, su Soobin cumplía un añito.
Claro, Jimin y Yoongi hicieron una pequeña reunión con los padres de ambos y alguno que otro amigo. Soobin era travieso, eso de ser juicioso era mentira, podía ser bueno fuera de casa pero dentro era quisquilloso y escurridizo.

— No corras Binnie, te puedes caer — Jimin siempre con su instinto protector.

— Déjalo, hasta que se caiga va a aprender. Así era Yoongi cuando aprendio a caminar, era muy travieso — dijo la mamá omega.

— Oh... Me imagino, Soobin tiene mucho parecido a él en muchas cosas, le juro que no se parece nada a mi, Yoongi es una fotocopiadora — dijo Jimin entre risas. 

— Veo que está muy apegado a Yoongi — dijo la madre alfa.

— Claro, ahora me preguntó donde andarán.

La omega miró a Jimin y sonrió; su nieto estaba con Yoongi, el alfa lo sostenía en sus brazos y le susurraba algunas palabras haciendo sonreír al pequeño bebé. Jimin disfrutaba ver a Yoongi ser el padre ideal, de pronto se acercó a los amores de su vida.

— Vengan todos, vamos a partir la torta.

Todos se acercaron al centro de la sala y le cantaron el feliz cumpleaños al cachorro quien miraba con una sonrisa inocente a todos.
— ¡Binnie! ¡Mira aquí, pequeño!

Todos empezaron a sacarle fotos al cachorro el cual les regalaba sonrisas, Soobin era un niño muy feliz, también era un coqueto lo cual debían tener cuidado más adelante. Una vez que todos se sacaron fotos con el pequeño fue el momento de ambos padres.

— Jiminie, gracias.

— ¿Hmm? ¿gracias por qué? — contestó confundido.

— Gracias por darme a Soobin y estar a mi lado sin importar qué — le sonríe mostrando sus dientes.

— Ohhhh Yoon, gracias a tí.

Los tres sonrieron para la foto, Jimin planeaba enmarcar uno de los más bonitos recuerdos.
Sinceramente ninguno de los dos cambiaría su vida por nada del mundo, así como estaban, era perfecto.

— ¡Estaba muy rica la torta! — dijo Jackson. — Ya me debo ir chicos, gracias por haberme invitado, Soobin se ve feliz con todos los regalos que le traje.

— Demasiados diría yo — dijo entre dientes
Jimin. — Incluso le sobrarán para navidad...

— Yo también debo irme — dijo Felix. — Me iré junto a Jungkook y Taehyung.

— Claro no hay problema, cuidado por el camino — Yoongi contestó mientras comenzaba a acomodar la sala y la cocina.

— ¡La tendremos! — Jungkook y Tae se miraron con complicidad mientras salían.

El día fue un poco agotador a decir verdad, Soobin era un niño muy activo, los preparativos y los familiares.

— Nosotros también nos iremos, hijo — dijo Jin.
— Luego vendré a visitarlos ¿bien?

— Si papá, sabes que adoro cuando me ayudas con la comida y con el travieso Soobin — soltó una risa nasal.

— Adiós cariño, dejé otro pequeño regaló a mi nietecito.

— Ahhh, ¡suficiente, tenemos tantos juguetes aquí en la casa!

— Solo es uno pequeño.

Las madres de Yoongi ya se habían ido así que no tenían a quién más despedir.
Solo faltaba Taemin que trataba de alcanzar a las primeras personas que se fueron.

Una vez que ya todo estaba en silencio, Jimin cerró la puerta y caminó hacía la sala, la imagen que tenía frente a él era tan adorable, Yoongi tenía a su pequeño Soobin en los brazos arrullandolo, en ese momento recordó cuando el alfa se despertaba en medio de la noche para dormir al pequeño Soobin de la misma manera en la que estaban en ese momento.

— Son tan lindos.

— No más que tú.

— ¿Le estás diciendo feo a nuestro cachorro? — hizo un gesto indignado el omega.

— ¿Qué? No, no, no, no.

Jimin también rió cuando llegó hasta donde estaban sus dos personas favoritas, se sentó al lado de ambos y abrazo a Yoongi por la cintura.

— ¿Ya te había dicho que eres hermoso?

— Que si, si, si, todos los santos días de mi vida— Yoongi también recibía diversas muestras de cariño de parte del omega enamorado.

— Pues te lo vuelvo a decir, eres extremadamente hermoso.

Jimin soltó una risa y besó los labios del alfa.

Eran una bonita familia, Yoongi eligió a Jimin en vez de su destinado y Jimin... aún no sabe quién es el suyo pero prefiere nunca conocerlo, sin duda fueron hechos el uno para el otro, sus lobos eran felices.