Bajo el manto de la mafia - Juantin

I

Estaba acabando de recoger la cocina cuando de repente mi móvil empezó a sonar, rápidamente miré quien llamaba hasta que me di cuenta de que era un número privado y lo cogí:

- Diga – dije extrañado

- Buenos días, Martín soy Noemi Galera la directora del CNI, te necesitamos lo más rápido posible en Madrid. Cuando llegues aquí te daremos más información, de momento un coche llegará a casa a buscarte dentro de 2 horas, llévate una maleta porque no sabemos cuánto durará tu estancia en Madrid. – dijo la mujer al otro lado del teléfono

- Es Martin sin tilde – dije en un tono de reproche – y déjame ver si lo estoy entendiendo bien, debo irme de urgencia a Madrid en 2 horas exactamente– dije un tanto dubitativo

- Si veo que lo has entendido, nos vemos en unas en Madrid, Martin sin tilde – dijo Noemi para después colgar el teléfono.

Suspire y volví para terminar de colocar rápidamente la cocina, todavía seguía dándole vueltas a lo que acababa de pasar, cuando acabe de ordenar todo me fui directamente a mi habitación para poder preparar la maleta que me había mencionado anteriormente Noemi. Una vez acabada la maleta miré el reloj y puede ver que tenía el tiempo justo para ducharme, cogí rápidamente unos calzoncillos limpios y me duché rápido.

Comprobé que estuvieran todas las persianas bajadas, cogí mi maleta que estaba en la entrada de casa y le di un último vistazo a lo que consideraba mi hogar con la esperanza de volver a él lo antes posible. Cuando llegue al portal pude ver un coche negro grande delante de la puerta, por lo que supuse que era mi coche, se bajó un hombre que me pidió que le diera mi maleta para guardarla, iba a entrar al coche cuando se abrió la puerta de golpe y pude ver la melena pelirroja que tanto adoraba.

- ¡¡Rus!! – dije al ver como la pelirroja se baja rápido y me abrazaba -
¿Qué haces aquí? – dijo separándose para poder mirarla

- ¡¡Martin!!, Pues ya ves aquí que él deber nos llama – dijo sonriéndome – venga entra al coche que te están esperando – dijo tirando de mi mano para entrar rápidamente

El viaje a Madrid me lo pasé hablando con Ruslana y durmiendo a cada poco que podía, cuando me di cuenta estábamos entrando directamente dentro del recinto del CNI donde pudimos divisar a un grupo de personas esperándonos en la puerta del edificio principal, cuando bajamos del coche fui a coger mi maleta y nos acercamos hasta el edificio donde vimos a una mujer y a un hombre a su lado.

- Siento que haya sido todo con mucha prisa, pero necesitamos a nuestros mejores agentes en este momento – dijo Noemi mirándome en ese momento – Bienvenido al Centro Nacional de Inteligencia agente Urrutia, entremos tenemos mucho de lo que hablar – dijo dándose la vuelta para entrar al edificio.

Estar allí era impresionante, no tenía nada que ver con lo que estaba acostumbrado a ver en Getxo, el edificio se veía enorme desde fuera, tenía un pequeño jardín en frente de la puerta donde se podía apreciar el gran asta donde izaba la bandera de España.

Una vez dentro nos llevaron a una gran sala donde pudimos ver que había dos carpetas sobre la mesa, nos sentamos y fue entonces cuando Noemi nos dijo

- Dentro de esas carpetas encontrareis toda la información que hemos podido recabar de momento sobre la familia Bona Arregui una de las mafias más peligrosas de España, desde que ocurrió el accidente donde murieron gran parte de los integrantes de esta cambiaron las reglas del juego, su nuevo líder el hijo mayor de la familia no ha dejado que nadie se les acerque – dijo haciendo una pequeña pausa y mirándome – entonces aquí entras tú, Martin, el negocio familiar de los Bona era un restaurante con espectáculo musical llamado La Magallonera situado en plena Gran vía, Ruslana solo te acompañara esta vez, necesitamos que entréis dentro y estéis atentos a cualquier tipo de actividad rara o sospechosa que se pueda dar, por ello iras en busca de trabajo, preguntando por si necesitaran a gente para el espectáculo de cada noche, una vez estes dentro del elenco podrás moverte mejor – dijo mirándonos a Ruslana y a mí que estábamos justo en frente de ella – ahora os enseñaremos una foto del que actualmente es el jefe – dijo sacando unas fotos de un sobre – él es Juanjo, puede que parezca inofensivo pero no os hacéis a la idea de las atrocidades que él y su mafia han hecho desde la muerte de sus padres.

Cuando vimos la imagen vimos a un joven de ojos marrones, con el pelo castaño y una sonrisa que te hacía pensar que no mataría ni a una sola mosca.

- Pero como se supone que entraremos a ese restaurante, porque tiene pinta de ser bastante exclusivo – dijo Ruslana mirando en dirección a Noemi

- Por eso no os preocupéis, tenéis una reserva a nombre de Ruslana para esta noche, por cierto, recordaros que todos vuestros datos serán cambiados en todos los registros posibles hasta que se acabe la misión con el fin de protegeros a vosotros y a vuestras familias – dijo mirándonos a los dos Noemi.

- Bueno entonces supongo que esta noche tenemos una cena para dos en La Magallonera tú y yo – dije mirando a Ruslana con una sonrisa

- Martin es importante que sepas que desde que salgas de las instalaciones del CNI solo tendrás contacto una vez por semana con un agente que se acercara a ti, si fuera necesario puedes activar la alarma de tu teléfono si te vieras en peligro, en ese momento iremos a por ti – dijo levantándose Noemi de su asiento – espero que esta misión salga lo mejor posible, te encontrarás con Manu próximamente para informar de todo lo que hayas conseguido averiguar, no te fíes de nadie y ten cuidado con la gente de Juanjo nunca se sabe cuándo te están escuchando. Mucha suerte agente – dijo Noemi saliendo de la sala dejándonos a Ruslana y a mis solos.

Estaba acabando de colocarme la camisa cuando escuche la voz de Ruslana detrás de mí

- ¿Has acabado ya de arreglarte? – dijo mirándome con una sonrisa un tanto curiosa – Quien diría que iba a ver al gran Martin Urrutia de traje para ir a una cena – dijo riéndose mientras miraba que estuviera bien el pintalabios rojo que llevaba puesto

- Sabes de sobra que yo no iría así a ningún sitio – dije dándome la vuelta para mirar a la pelirroja que se encontraba en el marco de la puerta de mi habitación – estoy listo, recuerda que si vemos algo sospechoso durante la cena salimos y damos el aviso – dije saliendo de la habitación y cogiendo la americana negra que había en mi cama

- Quién sabe puede que acabes triunfando esta noche – dijo colgándose el bolso en el hombro derecho y tendiéndome las llaves del apartamento que me habían alquilado para poder vivir hasta que acabe la misión

- Pues dime tu con quien – dije riéndome mientras abría la puerta de la casa y cogía las llaves de su mano

- No se amor, hay muchos hombres guapos en este mundo todo puede pasar – dijo la pelirroja cerrando la puerta y yendo hacia el ascensor mientras yo cerraba la puerta y guardaba las llaves.

Cuando llegamos a la puerta del restaurante se podía leer en grande La Magallonera, al entrar pudimos ver un gran restaurante que tenia la apariencia de un teatro, las mesas estaban todas en el centro y justo frente a la puerta se podía ver un gran escenario con un telón rojo.

- Buenas noches, bienvenidos a La Magallonera a nombre de quien tienen reserva – dijo el camarero

- A nombre de Rosana Oliver – dijo la pelirroja

- Perfecto seguirme hacia vuestra mesa – dijo entrando a la sala, se veía que había gente con mucho dinero, de gustos refinados y que te miraban un tanto por encima del hombro – Esta es su mesa, ahora mismo vengo a tomarles nota, disfruten del espectáculo – dijo el camarero retirándose, y en el momento justo que nos sentamos pude notar como las luces se apagaban al completo y un gran foco se encendió en dirección al escenario mientras veía como se levantaba poco a poco el telón y dejando ver al hombre al que venía a buscar, frente a mi tenía al mismísimo Juanjo Bona.