Odio los aviones, llevo 10 horas sentada y ya no siento ni el culo, pero por fin llego al edificio de mi hermana. Bajo del taxi después de pagar y saco del maletero mi maleta de viaje, toda mi vida en esa puta maleta de mierda, quien me manda a fiarme de un tío, si es que ya me lo decía mi madre "Amelie jamás te enamores porque terminaras como yo", claro que esa frase venía de la mano de dos botellas de Whiskey. Así que, todo por llevarle la contraria a mi madre y pensar que tal vez si que estaba equivocada y había un poco de amor en este mundo para mi, decidí que era buena idea enamorarme de Paul, jamás pensé que ese "buenazo" de tío después de 2 años de relación y vivir juntos me las iba a pegar con mi mejor amiga y en nuestra misma cama, hijos de la grandísima puta. Arrastro con rabia la maleta hasta estar delante del edificio, vuelvo a mirar la dirección en el GPS, llámame loca pero no estoy muy segura de que este edificio con aproximadamente 22 pisos y con pinta de costar una millonada sea la pequeña y rural casa de mi hermana. Frunciendo el ceño busco el contacto de mi hermana, antes de que una voz me interrumpa.
-Joven, viene usted también a la entrevista de trabajo?- una señora mayor de aspecto agradable me sonríe mientras me pregunta señalando al edificio.
-Perdona, pero no se- antes de que pueda decirle que se ha equivocado me agarra del brazo y me arrastra hacia dentro del edificio.
-Eres como la persona número 500 que viene, el Sr Smith está en contra de que me jubile así que ha considerado que rechazar a todas las personas que vienen es lo mejor, te puedes creer que la última que declinó fue porque según el era "demasiado rubia"- suspira exasperada mientras me arrastra, casi literalmente, hasta un ascensor. Una vez dentro se gira hacia mí con una sonrisa- por dios no paro de hablar, lo siento, como te llamas querida?
-Amelie, mi nombre es Amelie-digo totalmente confundida, en alguna otra situación me hubiera parecido hasta graciosa esta charla inesperada, pero no entiendo absolutamente nada de porque he acabado aquí.
La señora sigue hablando sin darme tiempo a pensar con claridad que está sucediendo, y termina arrastrándome hasta unas puertas enormes de madera. Da algunos toques en la puerta y espera impaciente.
-Qué pasa?- suena una voz grave con tono enojado desde el interior, un escalofrío pasa por todo mi cuerpo e incluso diría que tal vez debería ir un momento al baño para averiguar si me hice pis encima, ¿acaso es normal que una voz sea sexy y a la misma vez de miedo? Porque sino lo es estoy segura de que tantas horas sentada me han dejado majara de la cabeza.
La señora, cuyo nombre desconozco, abre la puerta ligeramente y se asoma por ella.
-Sr, ya llegó la próxima persona para entrevistar, sea amable por favor- se da la vuelta y sonriente me empuja hacia la sala, cerrando la puerta detrás de mi.
Agarro la maleta con fuerza viendo como la señora me acaba de dejar totalmente vendida, me doy la vuelta tranquilamente y lo que me encuentro delante de mis narices me deja con la boca abierta y babeando. El chico más guapo y sexy en toda mi vida, ¿es siquiera legal portar tal belleza?, rostro serio con unos ojos increíblemente azules y una mandíbula perfilada, recorro su cuerpo, lleva un traje formal que marcan sus potentes músculos y unas manos grandes masculinas y a las que se les notan las venas, babeo si quiera de pensar que maravillosas cosas podría hacer ese señor con esas manos. Si antes pensaba que tenía que ir al baño ahora estoy completamente segura, pero por una razón completamente diferente.
-Mmmmm, ya terminó de examinarme señorita?- dice con su voz gruesa y levantando una ceja, estoy segura de que yo intento hacer eso y en vez de parecer sexy parezco subnormal.
-Bueno, si me deja unos segundos más le agradecería- le respondo sonriendo levemente, tal vez tendría que mantenerme callada pero total no voy a volver a verle en la vida, en cuanto le explique la confusión me iré y podré llamar a mi hermana para preguntarle porque me envió una dirección errónea.
ESTÁS LEYENDO
Dirección Equivocada
RomansaAmelie, una chica divertida pero con secretos escapa de la vida que conoce, con el corazón roto. De Italia a New York vuelve a los brazos de su hermana buscando algo de la paz que la vida, y personas concretas, le han arrebatado. Una dirección equi...