Capítulo 3

524 51 13
                                    

Era ya entrada la mañana cuando Renjun regresó a su departamento. Se topó con un par de vecinos en el camino, pero ninguno pareció sorprenderle que llegara a esas horas, probablemente pensaban que tuvo turno nocturno en la clínica o incluso que se quedó con Jaemin, como había hecho otras veces. En realidad, no tenían razón alguna para sospechar lo que estuvo haciendo toda la noche, pero él se sentía como si tuviera la palabra 'culpable' grabada en la frente.

Se sentía tremendamente cansado pero satisfecho. Durante todas las horas que estuvieron juntos, él y Jeno se la pasaron haciendo el amor, tomando sólo algunos intervalos para descansar e incluso platicar de cosas triviales. Sólo de recordar lo que hicieron, lo que Renjun le había hecho, lo que había dejado que Jeno le hiciera, se sentía sonrojar.

Demasiado cansado como para preocuparse de colocar sus cosas en el lugar correcto, se limitó a aventar en una esquina de la entrada y se encaminó hasta su recámara para poder dormir un poco antes de que tuviera que regresar a la clínica.

No se percató de la presencia de alguien más en su departamento hasta que casi choca con él. Al ver frente a él a Jaemin no pudo evitar ponerse nervioso y desviar la mirada. Nunca esperó encontrárselo en aquel momento, en su casa, cuando regresaba de su encuentro con Jeno.

Jeno.

Por un momento tuvo el irracional pensamiento que el aroma del rubio aún estaba impregnado en su piel y Jaemin no tardaría en detectarlo y reconocerlo. Algo totalmente ridículo porque se había duchado a conciencia, sobre todo porque Jeno y él jugaron por interminables minutos con el jabón bajo el chorro de agua de la ducha.

-Jaemin, que... sorpresa. No pensé que te vería en estos días, como dijiste que esta semana no tendrías descanso...

Esperó notar en él algún signo de incomodidad, contrariedad o culpa, si era mucho pedir, pero en lugar de eso se encogió de hombros. ¿Cómo podía ser tan cínico?

-Así es, pero pensé en venir a saludarte.

-Pues... gracias

-¿Dónde estuviste toda la noche? Vine a verte en la noche y no estabas, regreso temprano y tampoco estabas. Creo recordar que me habías dicho que tendrías dos días libres ¿Qué pasó?

Esa era la puntilla perfecta. La entrada perfecta para que él le soltara lo que había hecho, la manera en que se desquitó de su nuevo engaño, incluso, si se sentía lo suficientemente capaz, podría darle detalles que destruyeran su orgullo por completo. Su momento había llegado, sólo tenía que abrir la boca y decírselo.

-Yo...

Pero dudó en el último minuto y las palabras deseadas se negaron a sus salir de sus labios. No entendía lo que pasaba, pero en lugar de lo que planeó terminó diciendo.

-Estuve con Donghyuck. Él también descansó así que me quedé a pasar la noche con él.

-Comprendo -el lugar se vio invadido por un tenso silencio, provocado por la confusión de Renjun por no poder expresar las palabras que tanto deseaba mientras que Jaemin estaba confundido por la actitud tan esquiva del mas bajo -¿Sabes? Estaba pensando que podría quedarme contigo por unas horas. Tengo un tiempo libre en la estación que podría pasar contigo. Hace mucho que no me quedo a dormir en tu casa ¿qué te parece?

"¿Qué qué me parece? ¡¿Espera que acepte gustosamente acostarme con él, cuando de seguro acaba de salir de la cama de ese...?!"

Claro que la situación también era compartida por su lado, pero él no tenía tan poco pudor como para pasar de una cama a otra con sólo unos minutos de diferencia. De hecho, además de esa situación, no sentía la menor excitación ante la perspectiva de irse a la cama con Jaemin.

[𝔻 / 𝕍] (NoRen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora