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El conejo

Mateo y la joven iban de camino de regreso al palacio del arcangel de la muerte, el palacio era muy bonito con flores por todos lados y una viste al cielo hermosa.

Ambos al llegar notaron que Azrael aun no llegaba por lo que se pusieron a trabajar con el hábitat para el conejo.

Mateo: mi señora ya pensó en algún nombre para el conejo y su bebé?

Oh Mateo para el conejo ya que es hembra se llamara Abigail y para mi bebe Azrael ya pensó unos cuantos para el o ella

Mateo: el señor Azrael debe estar muy feliz de formar una familia con usted mi señora

Ya lo creo Mateo

Ambos seguían construyendo el habitat para el conejo cuando a la joven de dio un fuerte mareo

Mateo: mi señora!? Esta bien?

Estoy bien solo fue un mareo

Mateo: siéntese mi señora yo termino con esto

Dice el pequeño querubín para seguir con su trabajo

Mateo: mi señora no cree que ya es muy tarde para que sigue haciendo esto?

Tienes razón Mateo pero aun no llega Azrael

Mateo: si gusta yo lo puedo ir a buscar talvez este ocupado

No te preocupes, ven vamos a tomar una siesta

Ambos se quedan en la sala dormidos en el sofá con el conejo en su habitat, llega un joven pelinegro a la habitación y ve a su esposa y al querubín dormidos profundamente toma una cobija y se las pone encima para cubrirlos del frío, el se acerca a su esposa y le da un tierno beso en los labios y se aleja para seguir con su trabajo como arcángel de la muerte

mi pequeño ángel Azrael y tn Donde viven las historias. Descúbrelo ahora