𝗦𝗶𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲 ♡︎ |ᵃᵍᵘˢ ʸ ᵉˣᵉ

6

un pequeño viaje al pasado;

2021

agustina;

— ¿como te sentis? —me pregunta Paulo pasándome un mate.

— rota. —lo mire sincera, después mi mirada fue a Lionel.—, No sé que hice mal, yo le di todo.

— ya te dije Agus, ahora son Lionel y vos, no tenes que preocuparte más.

suspire mirando a mi hermano, después mire a mi bebé de tres meses. estaba cada vez más grande, cada vez más parecido a él.

Exequiel venia a verlo, muy de vez en cuando, pero venia... aunque ahora estaba muy ocupado en su nueva relación.

acoste a Lionel en su cuna, Paulo se había ido, tenia que ir a trabajar. me quede lavando un poco todo, convivir con un bebé sola no estaba siendo fácil, nada de esto era fácil, era todo difícil y triste la situación, daba tristeza.

tocaron la puerta, me seque las manos con un repasador y fui a abrir, me terminé encontrando con Orellano, sonreí de lado.

— Luca, pasa. —me hice a un lado.

— hola bonita. —me da un beso en el cachete.—, ¿Cómo estás?

— bien, un poco cansada ¿vos? —le digo poniendo la pava para unos mates.

— todo bien, más mejor ahora que te veo. —sonríe de lado, dejando sus manos al costado de mi cintura.

me molestaba tanto no poder sentirme bien con Luca, cuando sus manos tocaban mi cuerpo lo único que recordaba eran las manos de Zeballos tocando cada parte de mi cuerpo.

— ¿viniste a dormir la siesta conmigo? —le doy un corto beso.

— con vos quiero dormir toda la vida. —se esconde en mi cuello.—, Me encanta tu perfume, ¿sabias?

— te quiero rubio. —me reí tirando mi cabeza hacia atrás.

— te quiero mas morocha.

morocha... esa maldita palabra, ese maldito apodo me llevó solamente a un recuerdo, a un recuerdo de más bien cuando estaba recién conociendo al chico que hoy, no podía olvidarme.

• • •

2019;

— ¿por qué no queres que jalamos videollamada? dale boluda. —se ríe.

— porque sería raro Exe, nunca nos vimos las caras, excepto por Luis.

— hace dos semanas venimos hablando día y noche por llamada, quiero verte mientras hablamos.

— estoy desastrosa, horrible.

en ese momento veo exactamente cómo Exequiel quiere cambiar la llamada por videollamada. nervios recorren mi cuerpo, no me animaba, me daba vergüenza.

— pesado. —tape la cara muriéndome de los nervios.

— si, yo te llamé para ver todo negro. —se ríe.—, Dale Agus.