『 Nᴏ ᴘᴜᴇᴅᴏ sᴇɢᴜɪʀ ᴄᴏɴᴛɪɢᴏ. - (Vᴇɴᴜs x Tɪᴇʀʀᴀ) 』

- ᴄᴀᴘ 8 ʜᴏsᴘɪᴛᴀʟ -

Tierra despierta. Mira con atención a sus lados, no reconocía donde estaba. Se pone en la orilla de una camilla donde estaba acostado, al rato logra tener conciencia y ver con claridad lo que le rodea. Estaba en un hospital. Se levantó y camino por el pasillo, veía gente acostada, con yesos ect. No sabía a donde ir, solo siguió caminando sin rumbo por el Hospital.

— ¡Niño!

Grito un enfermero. Tierra paro y giro su mirada hacia el enfermero que se veía que lo buscaba. Su forma de hablar. Estaba agitado y agotado, se ve que corrió y se desespero.

— Te busque por todo el hospital. No debes de irte así sin ninguna supervisor. Ven. — Dijo el enfermero aliviado de encontrarlo, el enfermo agarro la muñeca de Tierra y lo llevó hacia una habitación. Donde estaba la camilla donde despertó.

— Será mejor que no digas una palabra, tienes la garganta lastimada. Si lo haces te podrá arder. Hasta ahora puedes beber agua, siéntate aquí y esperame, no te vayas. — Dijo el enfermero dejándolo ahí.

Tierra quedo esperando ahí sentado aburrido. No recuerda que ha pasado para llegar ahí. Se levanta y abre un poco las puerta para ver si el tal enfermero venía o no. Pues no, pasaba gente y gente. Del aburrimiento cerro y se acostó.

— Ps, oye niño. – Se escuchó una voz proveniente detrás de la cortina que cubría la camilla de al lado.

— ¿A ti también te paso algo? - Dijo un niño, era muy pequeño. Pero tenía su misma edad, traía lentes y brackets.

Se veía con curiosidad. Tierra no pudo contestar ya que el enfermero le advirtio. Así que hizo señas.

— ¿No puedes hablar?, vale. Con verte tan vendado de pie a cabeza, de seguro te paso algo grave. — dijo aquel chico con un yeso en la pierna izquierda y en el brazo derecho.

Tierra no sabía que le paso, por dentro moría de curiosidad.

— Pues yo me caí de las escaleras. Fue muy doloroso, me resbale con mis lentes que los pise. — Dijo con un tono Entristecido.

— ¿Y tu sabes lo que te paso? —

Tierra se encogió de hombros.

— Oh, vale. Por cierto me llamó Plutón. — dijo con una sonrisa, dejando de lado lo triste.

— Viendote apuesto que te llamas tierra. —

Tierra asintió. Y escuchó pasos del pasillo, sabiendo que el enfermero ya iba a llegar, se fue rápido y se acosto en su camilla.

— Tierra, ven te cambiare a una habitación solitaria. Vienen alguien a visitarte. — El enfermero tenía una bolsita llena de Remedios. Para la tos y entre otras cosas mas, Tierra se levantó y lo siguió hasta la habitación. — Siéntate ahí y ya vendrá. Son dos personas por separado. —

El enfermero dejó el enfermero deja bolsa en un escritorio del cuarto. Y se fue.

Espero unos minutos aburrido hasta que entró su padre Júpiter.

— Hijo mío, me tenias preocupado. Te tenían todo vendado... Sangrabas por doquier. ¿Te sientes mejor ahora? — Dijo Júpiter con un tono preocupado.

Tierra asintió y le dio un abrazo. Los dos hablaron por minutos. Hasta que se le acabo el tiempo, Júpiter se despidió con un beso en la mejilla y se fue.  Tierra se sentía cansado así que se acosto en la camisa y quedó en forma de feto.

— 4 Horas depués. —

Tierra se despierta un poco mejor. Podía decir algunas palabras solo que le daba picazón y le molestaba, se sentó y se acomodo. Tenía que tomar sus pastillas, gira su cabeza hacia le mesita y ve a su amigo sentado ahí. Era Marte.

— ¿Marte? —

Marte se despierta también, estaba dormido en la silla, lo estaba esperando tanto tiempo que se durmió.

— Oh, Tierra ¡Como estas! — Dijo con una sonrisa.

— Bien.. Con dolor en garganta. — Tierra no podía decir algunas oraciones correctamente por el ardor y picazón. Estaba cicatrizando su herida del cuello, justo en la garganta.

— Oh, que mal.. Te traje esto para ti, no es tan bonito pero me costó. — Dijo Marte entregándole una cajita envuelta de papel de regalo.

Tierra lo abrió y sonrió, era un peluche de el en forma de pelota. Era de una tela esponjosa y suave.

— Edta hermoso, gracias— Dijo tierra dandole un abrazo.

— Hay gracias, pensé que no te iba a gustar... Pero es bueno que te guste. — Dijo marte feliz.

Marte se levanta y agarra la mano de Tierra para que se levante. Tierra sentía el aroma de Marte, era de un perfume caro. Y vestía elegante, solo para verlo... Y trajo un regalo de forma de corazón para el. Tierra da una sonrisa hacia Marte.

— Ten, toma. — Dijo Marte sacando una carta de su bolsillo. Era de una fiesta.

—Es una invitación, será dentro de 4 días, se que saldrás después de 3 días. ¿Querés ir? — Dijo Marte sosteniendo la parte de la cadera de tierra mientras estaban parados.

— Claro, ¿Por qué no? —

Queda un silencio incómodo entre ellos, solo se miraban.

Marte quería decirle algo, pero eso cambiaría mucho la relación más adelante, Pero quiso arriesgarse. Ya de un principio quiso declararse....

— Tierra, ¿Te puedo decir algo importante? Espero que no cambie nada dentro de nuestra amistad en un futuro. — Dijo nervioso, mirando con una mirada tranquila.

Tierra sospecho, se puso nervioso pero sólo se centró en los ojos de Marte.

— Puedes decirme todo lo que quieras. Al final, ¿Qué cambiaría entre nosotros? —  Dijo tierra hablando con más claridad en ese momento. Sus voces entre ellos cada vez eran más tranquilas, sus pasos se acercaban entre sí, sus miradas se entrelazaban, olvidando de su alrededor. Para ellos su única cosa importante era  ellos dos en ese momento.

Hubo una conexión que cambiaría todo.

Ola, aclaró que esta historia le falta poco para terminar. Pero si recibe más apoyo capaz la alargare más si quieren ;3.