- ❞𝐇𝐄𝐀𝐓𝐇𝐄𝐑❞ || ☣Tʜᴇ Dᴀʀᴋᴇsᴛ Mɪɴᴅs☣

𝑴𝒚 𝒄𝒐𝒍𝒐𝒓?...

𝗖𝗔𝗦𝗦𝗔𝗡𝗗𝗥𝗔 𝗖𝗢𝗡𝗡𝗢𝗥;

Yo continuaba caminando sola y hambrienta por el bosque mientras sólo pensaba en como estaría mi madre sabiendo que ya no estaba en la Liga, me reconfortaba el hecho de caminar por el bosque, aunque aún estaba cansada y tenía bastante hambre.

No iba a mentir, no era fácil para una niña de 12 años caminar por ahí como si hubiera gente que podría secuestrarla por poseer 2 colores, por eso me prometí que no le diría a nadie mis colores asignados.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por unas voces adultas que se acercaban hasta donde yo estaba, rápidamente me escondi.

— Crees que vamos a encontrar más? Este lugar está desierto. Es como si no quedara nadie...

— Deja de quejarte y camina, estamos avanzando —

Me alarme un poco por aquellas voces, no quería que me vieran, el miedo comenzaba a ser mayor, haciendo que mi fuego apareciera en un círculo, atrapandolos en pequeñas llamas

— ¿Qué demonios es eso?... — Dijo el hombre

— ¡¿Quien está ahí?!

Mi cuerpo comenzó a reaccionar y comencé a correr con todas mis fuerzas hasta encontrar una gasolinera abandonada que podía ocultarme, claramente me vieron y los hombres trataban de encontrarme y llevarme con ellos, sin duda no sabía que hacer

En los años que estuve en la Liga, jamás use mis poderes, está era una desventaja, mantuve tanto tiempo ocultando mis colores que ahora no sabía cómo defenderme, estaba en riesgo

Ya no sabía que hacer, los hombres me vieron de nuevo y se acercaron a mi lentamente

— Vaya vaya vaya, al parecer hemos tenido suerte, ¿No crees Richard? — Sonrió egocentricamente mirando a su compañero.

— Por ti van a darnos una gran comisión, quiero que nos digas, Cuál es tu color?.

Yo no podía hablar, no sabía que hacer pasa escapar y con mi mirada de ternero en el matadero no hacía nada más que causarles gracia a esos hombres, se veían tan emocionados y triunfantes de haberme encontrado...

Un gran estruendo causó que uno de los hombres y yo voltearamos a ver como uno de ellos salió volando de la nada y chocaba con las estanterías de la tienda, escuche una voz algo aguda y logre ver a un niño rubio con ojos claros y encendidos lanzando a otro hombre que había equipado su arma, el me miró y yo estaba estática

— ¡Pronto!, ¡sigueme!—

Así que sin dudarlo, tome su mano y corrimos hacia otra parte, para nuestra mala suerte los hombres se levantaron y comenzaron a perseguirnos, sentí algo cortar mi respiración, una especie de olor inundó mis fosas nasales haciéndome perder la consciencia y el equilibrio, lo último que pude ver, fue a ese niño cayendo al suelo y luego.. todo se volvió negro.

Horas después me desperté en una habitación, me asusté y me levanté para tratar de salir, ni siquiera noté que había alguien más en la habitación, sólo seguí golpeando la puerta tratando de salir

— ¡Abran la puerta! Déjenme ir!— Dije golpeando fuertemente la puerta

— Es inútil, ya lo intenté. Al parecer si hablas eh—

Al escuchar esa voz voltee mi cabeza inmediatamente hacia esa dirección, viendo a el niño que lanzó a esos sujetos hacia los estantes momentos atrás, era rubio, algo pálido y delgado se veía que éramos casi de la misma edad, sus ojos eran de un color algo azul si no me equivocaba