Hierba, cocaína, éxtasis.
A él le gustaban esas cosas, no lo olvidaba, aceleraban los latidos se su pecho y lo golpeaban. Su respiración le indicaba las largas horas de la inconsciencia que cargaba consigo, pero no era algo que le molestará parar por ahora. Estaba drogado, pero sus ojos dilatados apuntaban a la persona que le provocaba más que una relajación, más que la dejadez de la misma sustancia o la forma en la que todo su cuerpo se entumecia y no lograba sacar el dolor de su cabeza al día siguiente.
Los narcóticos eran efectivos o quizás justo la vista desde su mesa, le hizo pensar que Lewis era una especie de angel caído desde el infierno en medio de la pista de baile. Una de las meseras le brindó una copa más de su bebida favorita, con un Gin Tonic en su mano y con las facultades tan afectadas, pensó que era mejor idea callarse y disfrutar de la fiesta solo un poco, antes de que derrumbará toda su bebida sobre algún extraño con todo el efecto de la droga que llevaba encima.
Pero cuando la mirada de Lewis se ponía sobre él, aliviaba todo su estrés.
Toda la discreción desde la otra punta del club era inexistente a este punto de la madrugada, con esa batalla de miradas que seguía en pie entre ellos. Las rastas sueltas de Lewis y su camiseta abierta mostrando su pecho, sudor y pezones, desmostraron que él estaba allí para exponerse y mostrarse sin ningúna vergüenza ante todos, siendo internamente consciente de la mirada tan absorta y sorprendida de su antiguo rival, que sobre todo, era de deseo.
Max estaba tomando respiraciones profundas para no abalanzarse sobre Lewis en esos momentos y desvestirlo, pero todo aquello era imposible de todas maneras al final de cuentas. Estaba completamente dispuesto a rendirse sobre su sonrisa tan hermosa, su pecho expuesto y la mirada tan insistente en provocarlo con cada movimiento, entonces lo que sea estuviera pensando y simplemente lo ignoraria y se marcharia de allí.
Sabía que Lewis no era una especie droga, por supuesto, pero cada vez que lo veía era como sentirse drogado y ser golpeado por una ráfaga de emociones intensas, en su mayoría, confusas y por otra parte, repletas de deseo pero sin la claridad suficiente para hacerlo reaccionar en su sitio, estaba inmóvil y llenó de sustancias, pero lo disfrutaba. Era una sensación de completa euforia, pero no estaba satisfecho en su totalidad hasta entonces, quería sentirlo más de cerca, un contacto más directo y satisfactorio.
Las luces del club lo hicieron dejarse llevar después de tanto tiempo sentado en su lugar, la pista se inundó de colores vivaces mientras el violeta y azúl predominaban cubriendo a las cientas de personas que rebozaban aquel club a esas horas tan altas de las madrugada. Pero era curioso como para Max eso no significaba un impedimento para seguir observando a Lewis desde su lejanía, y como esté mismo caminaba en medio de la pista en ese mismo instante para desenvolverse en ella.
La danza del hombre era hipnotizante, no lo dudaba ni por un segundo, él cuerpo de su antiguo rival se movia al son de una canción pegadiza, pero cursi a su vez, comparando al efecto de las drogas como si fuera algo de lo mas parecido a sentir algo tan complejo como el amor. Era irónico porqué justo ahora, después de fumar un poco de hierba, la idea de que Lewis provocará ese estado de tranquilidad en él en vez de todas las drogas que tomó durante todo este tiempo, sonaba más tentador.
Él no era una droga, pero, ¿por qué se sentía justo como una?.
Estaba excitado, quizás demasiado. Pero la agitación en sus pantalones no se comparaba con la ganas de pararse e ir a por él sin importarle nada, como si no quisiera reclamarlo en frente de todos, desmotrarle a todos que ese hombre era suyo, solo que el único problema era qué, ni siquiera tenía en claro como dirigirse a él a estás alturas después de todo lo sucedido entre ellos. Estaba terriblemente confundido, pero no dudaba de sus intenciones, estaba dispuesto a intentarlo alguna vez cuando ni siquiera fuera capaz de balbucear algo con sentido.
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So High | (Lewis Hamilton & Max Verstappen)
Fiksi PenggemarMax nunca ha intentado ser amable con Lewis y nunca lo será. Porqué la sensación de sentirse drogado a su lado, lo está matando. Y porqué sabe que Lewis está demasiado alcoholizado para darse cuenta de ello. Advertencias: Mención de drogas, contenid...