Cartas al Pasado

UN NUEVO AÑO ESCOLAR.

Cuando cursamos el 5° grado a pesar del incidente que tuve los demas siguieron sus vidas como si nada excepto yo , ya que tenía un amigo en el cual podía confiar pero también ese chico me enseñó muchas como aprender a usar muesos impulsos e intentar defenderme por mi cuenta al principio no fue fácil, nunca fui chico problema en la primaria sino al contrario fui víctima del bulling ya que era uno de los mas bajos de estatura del grupo.

Era muy simple el más grande siempre atacaba al más pequeño ya que por serlo creía que no podía defenderse y era cierto, podria decirles que el 5° grado no fue el peor sino fue el 6° grado en el cual tenía que aprender a defenderme de los más grandes por que mi amigo no siempre tendría que cuidarme.

Era nuevo año y si ciertamente nuevos compañeros, cuando iniciamos clases me di cuenta que muchos de mis antiguos compañeros se habían cambiado de escuela y otros llegaron y tomaron sus lugaes incluyendo a mi buen y unico amigo que tuve, nunca imagine que ese chico se cambiaría de escuela también bueno tal vez sus padres tenían razón esa escuela no era para el ya que era muy sencilla, cuando llegue al salón fui directo a sentame en mi mesa como siempre y derrepente veo q un chico muy alto estaba ahí sentado, no supe que hacer si decirle amigo esa es mi mesa o decirle amigo puedes moverte es que esa es mi mesa no sabía que hacer deberás no sabia cual iba a hacer su reacción tampoco que tal y le decía algo y me daba un golpe o se levantara me diera la mesa y ala salida me esperaría y me diera una paliza, así que mejor lo que hise fue tomar una silla y sentarme en otra mesa hasta el fondo del salón donde se encontraban los más grandes y rebeldes no tuve de otra o era sentarme con ese grandulon o sentarme en una mesa detrás del salón, ni modo me fui a sentar donde estaban las fieras.

HORA DE CLASES PRIMERA HORA...

-¡oye enano quien eres tu!- exclamó uno de los nuevos.

-¡soy Enrique y tu!-

-¡que te importa enano!- exclamó riéndose con los demás.

-¡oye enano por q no nos haces un favor a todos y te vas de qui sólo nos estorbas!-

Yo sólo agache la cabeza -¡por que mejor no te vas tu!-

-¡que dijistes enano ,repite lo que acabas de decir!-

-¡maestra me están molestando!- dije yo con cara de me van a matar...

Después de que paso las horas de clases llegó la hora de todo niño esperado el recreo la cual para mi no era nada bueno ya que era el momento donde ellos podían atacar sin que los maestros se dieran cuenta.

Yo trate de huir de ellos pero por más que lo intente no pude me acorralaron como a un indefenso venado en medio de lobos salvajes, ese día por más que trate de defenderme no pude por que igual no sabía como tenía las agallas para decir de cosas a los demas y el coraje pero lo que no sabía era como usarlos en contra de ellos, sólo recuerdo que me tumbaron al piso y comenzaron a pegarme yo sólo cubría mi cabeza con mis manos pero fue inutil.

Así estuvieron ellos molestándome durante un largo bimestre pero siempre hubo alguien más gandalla en ese grupito de idiotas, un niño gordo más grande que yo quizás unos 10 centímetros más siempre me daba de cachetadas en el salón o siempre me molestaba yo estaba cansado y harto de el, mientras que el grupito de idiotas molestaban a alguien más ese gordo se las traía contra mi, recuerdo que una vez me humilló enfrente de todos los demas compañeros de clase me tiro al suelo de una cachetada e intento hacer lo mismo que el chavo del año pasado me avía hecho tomó mis brazos y piernas y sobre encima de mi espalda empezó a estirar y a estirar yo no podía moverme su enorme peso en mi espalda no me permitía moverlo, era demasiado pesado y era demasiado fuerte ya saben que la gente gordita a pesar de ser gordos tienen una inmensa fuerza, pero bueno no subestimemos a las personas gordas con todo respeto, no podía moverme no había nadie que me ayudara a mover a ese niño de mi espalda todos le tenían miedo por ser enorme pero derrepente una niña del otro grupo hizo que me soltara y se bajara de mi espalda yo adolorido me levante a como pude del piso y camine al salón, ni era lo mismo sin mi único amigo pero saben su partida de la escuela no sólo me hizo ver muchas cosas sino también entenderlas, sabía que el se iría de la primaria pero nunca pensé q sería muy difícil ser como el me dijo que fuera, ya estaba cansado de los que me molestaban pero sobre todo de ese estupido niño gordo.

Muy pronto jure más tarde que me vengaría de ellos y que los aria pagar por todo lo que me hisieron pasar, las humillaciones, ofensas pero sobre todo el que me hallan agredido físicamente, jure vengarme de ellos pero sobre todo de ese gordo.

Buscaba una manera de hacerlos pagar por todo eso, pero me di cuenta que sólo no podia necesitaba algo más que fuerzas, necesitaba de mi padre así que fui con el y el al parecer de todo lo que habíamos pasado logre perdonarlo incluso por averme golpeado todas esas veces.

-¡papá necesitó que me enseñes a defenderme!-

-¡para que!-

-¡bueno es que quiero aprender a defenderme papá, ya sabes para que no me deje de ningún tonto más grande que yo!-

-¡con que haci, bueno muchacho tendrás que esforzarte más si quieres hacer eso pero conmigo no cuentas para eso luego tu madre discutirá conmigo!-

-¡pero papá yo necesitó aprender no quiero ser el trapo viejo de nadie yo necesitó aprender a defenderme, a pelear por mi mismo!-

-¡si quieres aprender a hacerte hombre vete a las calles y ahí aprenderás lo que quieres,pero conmigo no cuentes así que vete!-

-¡esta bien papá iré con ellos entonces a aprender a defenderme por mi cuenta!-

Pensé y creí que mi padre me ayudaría con esto pero no, no fue hacia yo tuve que buscar la manera de aprender, recordé que uno de mis tíos entrenaba fullcontac es un modo de defensa fui por el y le suplique que me enseñara a pelear como él pero lo mismo me dijo que mi padre y no tuve más de otra que ir a casa y quedarme sin hacer nada, siempre regresaba de la escuela con golpes y moretones mis padres se dieron cuenta e incluso mi tío que aveces llegaba ala casa, el pensaba que le había pedido que me enseñara a defenderme para agredir a los demas pero al ver que no era hací decidió entrenarme y hacer de mi un gran peleador.

Entrené demasiado duró quería hacerlos pagar y mi odio y coraje hacia ellos me hizo pelar con más fuerzas mi tío al ver que en cada entrenamiento peleaba con más fuerzas y más coraje me enseñó a controlar todo eso, mi ira, mi coraje, y sobre todo mis fuerzas, tenía un buen entrenamiento pero no sólo me entrenó sino también hizo que me ejercitara un poco para tener una buena condición física además de un súper entrenamiento.

Pasaron los meses y cuando llegó la hora de defenderme lo hise con todo no tuve consideración alguna , me sentía listo para darle su merecido a ese grupito de idiotas y más al gordo que ya le traía ganas, sólo que antes del entrenamiento mi tío me hizo jurar que no lastimaría a nadie a menos que fuera necesario así que le di mi palabra y cuando regrese ala escuela sólo espere que me molestaran para darles su merecido a cada uno.