El Secreto De La Rosa Ausente

Capítulo 2: Brotes

27 años

Con un fuerte golpe, el cuerpo de Oscar Wilde fue derribado y cayó sobre la mesa del comedor de la Agencia Armada de Detectives. Dazai, con el puño aún en alto después del golpe, mantuvo una expresión serena pero firme mientras observaba la escena. En lugar de responder al ataque, Wilde habló con palabras afiladas: -"Usted es una persona verdaderamente incivilizada. ¿Cómo es que mi querido Chuuya fue tan desafortunado de caer en la red de alguien así?." -Un fino hilo de sangre comenzó a correr por entre sus labios.

El ruido provocado por el golpe alertó a los miembros de la agencia, quienes inmediatamente se acercaron para atender la situación. Sigma y Atsushi fueron los primeros en entrar - "¿Dazai?" - preguntó Sigma, su tono estaba lleno de preocupación mientras se acercaba a Dazai.

Los dos casi se paralizaron al ver la expresión seria en el rostro de Dazai, intercambiaron miradas.

Dazai levantó la vista hacia ellos, sus ojos aún reflejaban la seriedad del momento. -"¿Rampo ya está aquí?"-, preguntó con calma, su voz resonó en la habitación ahora silenciosa.

Atsushi trago saliva sintiendo una inmensa presión -"Aún no ha regresado de su almuerzo." - La tensión era palpable pero la preocupación por su mentor lo era aún más.- "¿Qué fue lo que pasó?¿y Wilde?"-

Durante un momento Dazai apretó los labios, no hubo respuesta y al igual que Wilde, sus palabras se desvanecieron sin dejar rastro alguno.

15 años

Tras la muerte del anterior jefe de la mafia, la ciudad de Yokohama era un completo caos, especialmente el lado criminal de la ciudad, decenas de pandillas y organizaciones florecían mientras que la Port Mafia luchaba por aumentar su estabilidad y crecer.

-"Pianoman, no soy un hombre al que le gusten las bromas, ¿Quieres que crea que están tan cortos de personal que enviaron a unos niños?"- El hombre de negocios preguntó mirando el maletín rebosante de dinero frente a él mientras paseaba la mirada con un obvio desdén a las personas frente a él.

Una de las pocas cosas que se habían mantenido estables en la organización era su crecimiento económico. Esto se debía a que tenían a personas como Pianoman; no era necesario ganar dinero cuando puedes fabricarlo tú mismo. Las conexiones del mafioso se mantuvieron fuertes incluso cuando el anterior líder murió repentinamente.

Por lo cual, durante los dos últimos años, se había vuelto alguien sobrecargado de trabajo, pues los otros preferían tratar con él en lugar del actual jefe: Mori, que carecía de la confianza de la mayoría de sus subordinados. Era por eso que el era una persona respetada por criminales de otras organizaciones y aún más importante, era uno de los encargados de ser intermediario para nuevas negociaciones.

-'Dazai-san es el protegido del jefe y Chuuya se está encargando de aprender todo lo relacionado con las joyas. Si tiene dudas, le puedo entregar cuatro millones más la siguiente semana. ¿Eso podría hacerlo sentir más tranquilo?'- Ofreció Pianoman.

-"Mi negocio vale más que unos cuantos millones, dejarlo todo en manos de unos niños es un poco . . ."- antes de terminar la frase un hombre hermoso se sentó frente al hombre e hizo un pequeño gesto con la mano para indicarle que guardara silencio; por supuesto, este hombre se trataba de Lippman, el oficial de relaciones públicas que era mejor que nadie en su trabajo.

-"Comprendo sus dudas, pero estas fueron órdenes del jefe. No lo haga más complicado; piénselo de este modo: si acepta, usted tendrá unos cuantos millones extra, mientras que estos niños" - Lippman volvió a ver a Dazai y Chuuya que parecían enojados- "Podrán irse a dormir temprano. Piano y yo cumpliremos la orden del jefe y lo más importante, yo no tendré que filtrar a la prensa la información sobre las empresas fantasma de las que sus amados hijos están sacando provecho"