Capitulo 4

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—Jade. —Llamo tan pronto como la veo.

Después de aceptar ayudar a Beck con Jade para que ella le hablé de nuevo, el me ha estado presionando con el tema.

—Vega. —Supongo que me está saludando— ¿Que quieres? —O no...

—Yo solo quería hablar contigo. —Rio nerviosa— Ya sabes, creí que después de lo del moretón falso y todo eso... No se, podríamos ser más...

No encuentro una buena palabra

Ella se cruza de brazos y me mira con desaprobación.

Dios, esa mirada me mata.

No, no. Tori, concentrate. Tienes que ayudar a Beck, no a ti. ¿Por qué acepte hacer esto?

No me hace feliz hacer esto. Es más, me parece estupido. Es obvio que si una relación necesita un tercero para funcionar, no es una buena relación.

—¿Más qué? —Jade cuestiona con fastidio.

—Más... Amigables ¿Unidas? —Le doy una sonrisa.

—¿Y yo por qué querría ser tu amiga?

—Vamos Jade, se buena conmigo... Yo acepté el castigo por ti.

—Ah, ¿Ahora me echas en cara que fuiste amable?

—No, no, claro que no... Solo creí que podríamos olvidar todo e intentar ser amigas nuevamente.

—De nuevo, ¿Por qué sería tu amiga?

Esto me está hartando.

¿Por qué se comporta así?

—Sabes, está bien. Ya no importa, no me quedaré aquí rogando como estúpida. —Me giro lista para irme.

—Oh, pero recuerdo que eres muy buena haciendo eso. —Jade comenta con burla.

Es el colmo.

—¿Qué? —Me giro molesta.

—Lo que oíste. —Ella dice con total seriedad.

—Pues tienes una pésima memoria, porque quien rogaba todo el tiempo eras tú. —Digo con enojo mientras la empujó un poco con mi mano hacia los casilleros.

Lo cual fue un gran error pues ella me devuelve el empujón mucho más fuerte.

—No me vuelvas a tocar. —Ella se empieza a alejar.

Si no estuviese tan enojada seguro solo dejaría el tema aquí. Pero me siento muy molesta por cómo se comporta y por cómo me trata.

—Hace un tiempo no decías eso, al contrario... —No se que me pasa— Tori, por favor, por fa...

No termino de hablar pues siento como mi cara arde. Al reaccionar me doy cuenta de que Jade me acaba de golpear. Tocó mi mejilla tratando de calmar el ardor.

Esto si que duele.

Auch...

—Eres una grandísima imbecil. —Ella dice con un gran enojo sosteniendo su bolso.

Sé que está tomando su bolso con mucha fuerza para controlar su enojo.

—Quiza hice esa estupidez en el pasado. Pero créeme, yo nunca más volvería a ser tan idiota. Así que no te me vuelvas a acercar.

Ella simplemente me deja ahí.

Creo que esto no salió como esperaba.

[...]

¿De Nuevo Tú? (Jori) - Historia En PausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora