↳ ❝ [ 012 ] ¡inteligencia! ❞

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Bajaron de las motos mágicas con miradas sigilosas, examinando de que el lugar estuviera desolado y que aún no habían sido descubiertos

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Bajaron de las motos mágicas con miradas sigilosas, examinando de que el lugar estuviera desolado y que aún no habían sido descubiertos.
Pero para su desgracia, había un hombre allí que vestía una armadura y tenía la cara seria. Pero el logo en su pecho no era el de Auradon, era el de Neverland.

- Bienvenidos. - dijo el caballero inclinando su cabeza suavemente. Mal miro confundida a sus amigos quienes le veían de igual manera. - Soy un caballero bajo el mando de su alteza real, el príncipe Alex de Neverland. - dijo el con voz seria y ojos fríos e inexpresivos.

- ¿Y... Que necesita? - pregunto confundida Mal.

- Tengo órdenes específicas de llevarlos conmigo. - habló seriamente y sin quitar la mirada fría. - Acompañenme.

Mal dio una mirada a sus amigos y todos dieron un pequeño asentimiento.

- Bien... - hablo la hija de Malefica.

El caballero inicio su caminar a el reino de Wondeland siendo seguido por los chicos de la Isla.
Caminaron hasta que estuvieron del otro lado del muro que separa Auradon de Wonderlan, donde un carruaje los esperaba.

- Suban. - el tono frío de aquel caballero aun seguia.

Los chicos que iban con el sin rechistar hicieron lo que el caballero les ordenó, apenas y tuvieron tiempo de sentarse ya que el carruaje comenzo su trayecto.

- ¡Dios! ¿por que siempre nos pasa esto? - pregunto Johan con un tono bajo e irritado.

- Creo que es por que siempre eres asi de optimista. - el sarcasmo del hijo de Cruella Devil resono en los oidos de sus amigos.

- Vamos chicos, no es momento de sus amigables discusiones. - les regaño Evie.

- Evie tiene razón. Debemos ser cuidadosos. Si lo que dijeron sobre Alex es verdad, estaremos bien, si no... Estaremos en graves problemas. - gruñó Mal y todos guardaron silencio al oírle, ella tenía razón.

- ¿Por eso aceptaste? - pregunto Jay sorprendido. Mal sonrió divertida.

- ¿Por qué creerían que subiría a un carruaje sin más? - Dijo y la hija de Garfio soltó una risita.

- Creí que ya estaba delirando. - bromeó la última, todos le siguieron en una suave risa, que se detuvo en seco al oír voces.

- ¿Quienes son?, y aún más importante: ¿donde se dirigen? - hablo la misma voz que habían oído hablarle a Alex.

- Soy un caballero de la guardia real y personal del príncipe heredero Alexander Pan de Neverland. En el carruaje se encuentran el chofer y seis invitados especiales del príncipe heredero. - habló como voz robótica, Mal alzó una ceja al oír el "príncipe heredero". - Nos dirigimos a Neverland.

- Bien, por qué ya saben... Del país de las maravillas solo pueden salir los que hayan entrando. - y aquella espeluznante voz se detuvo cuando el rechinando de puertas se oyó y entonces el carruaje se movió.

𝐑𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞 | ᴰᵉˢᶜᵉᶰᵈᵃᶰᵗˢ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora