𝐸𝓃𝒹𝓊𝓁𝓏á𝓃𝒹𝑜𝓉𝑒...~ || ʀᴀᴅɪᴏᴀᴘᴘʟᴇ ||

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐. 𝑴𝒖𝒇𝒇𝒊𝒏

¿Hemos tomado la decisión correcta?
¡Ya lo veremos!
Yo siempre confié muchachos 🥹

[...]

Tomó el frío mango alargado de la puerta principal de la cafetería, dudoso por su decisión; sin embargo, se dejó guiar por el aroma tostado que tanto le gustaba en las mañanas.

Estaba tildando el tiempo de llegada a sus clases, pero si sacaba bien la cuenta de lo cerca que estaba la estación Central, a la calle 23 de Brooklyn Brigde; le quedaban aproximadamente diez minutos de sobra; así que, ahuyentando el control de sus negativos pensamientos de irse sin desayunar; optó por adentrarse al lugar; siendo al instante en que entró, azotado en la cara por distintas fragancias que no determinaba de describir solo como café.

Notas achocolatadas con una sólida presencia de frutos secos tales como la nuez, avellana, maní...incluso almendra inundaron sus fosas nasales.

Deleitándolo al punto en que su boca ensalivó en exceso inconscientemente; era tanto el olor, que incluso creyó que podía utilizarlo como perfume. Realmente un buen café natural era difícil de conseguir sin un buen tostado y mucho menos sin un buen molido.

—¡Bienvenido a Coffee and Sweet, señor! ¿Qué puedo servirle el día de hoy?— una cantarina voz lo despabiló de su ensoñación con el café. Alastor parpadeó nervioso y agachó un poco la cabeza sin ver al presente, apenado. "¿Cuánto tiempo estuvo parado en medio de la sala?"

—Buenos días, me gustaría un café para llevar por favor-. habló despacio, acercándose a la barra sin prestar atención realmente al involucrado, sacando su celular para disimular su bochornoso momento.

—Entiendo, ¿algún sabor en especial?— Alastor al instante en el que su cerebro oyó la palabra sabor, no pudo evitar alzar la vista tan rápido que casi le truena un conejo. "¿Espera, sabores? ¿El café tenía sabores?"

—¿Sabores? ¿A qué se refiere?— el alfa frunció un poco el entrecejo; observando al chico rubio más pequeño; que usaba un tipo de banquita para que el mueble de la caja no lo tapara; sonreír ante su ignorancia.

¿Se estaba burlando de él?

—Sí señor, lo que oyó. Aquí manejamos distintos sabores de café, tenemos de frutas tropicales, el de notas floreales o el clásico café de frutos secos. ¿Cuál le gustaría probar?— a estas alturas, el alfa estaba mareado por los diferentes aromas del local que se mezclaban y abrazaban su nariz.

—Eh...sí, dame un cappuccino clásico grande, sin azúcar, con una pisca extra de café y dos gotas de sirope; con leche deslactosada...ah, y por favor no hagas un dibujo de un corazón— demandó el alfa, viendo como el chico rubio de ojos azules parpadeaba sorprendido; moviendo sus labios ligeramente deletreando mudo el pedido; tratando de recordar cada detalle del alfa en orden.