Caído del cielo.

Ova 2: Tristes Recuerdos del pasado

Era una agradable tarde en el Reino del Trébol, los pájaros volaban y cantaban alrededor de un prado. Los animales iban a conseguir su comida para sobrevivir de sus depredadores y los antes mencionados iban a por presas para alimentarse a ellos mismos y a su respectiva manada

Sin embargo se encontraban 2 personas un hombre y una mujer los cuales aparentaban tener unos 30 años (aunque la mujer aparentaba unos 20) los cuales iban caminando tranquilamente en dirección a lo que parecía ningún lugar en específico. Solo que la mujer tenía vendas en sus ojos y estaba siendo guiado por el hombre el cuál tenia una sonrisa tranquila, pero por dentro estaba emocionado por ver la reacción que tendría la mujer una vez que le quitara las vendas.

???????: Oye ya puedo quitarme las vendas-Pregunto un poco desesperada la mujer.

???????: Aún no, pero falta muy poco y creeme que te gustara lo que te voy a mostrar- Respondió el hombre.

La mujer tenía cabellos cortos, los cuales su color era una combinación de rubio y blanco,ojos verdes y ella no era muy alta, tanto así que para molestarla el hombre que lo acompañaba a veces *cof cof* casi todo el tiempo* cof cof* la llamaba enana. Esta mujer tenia una camisa blanca con mangas largas y encima de la misma tenia un chaleco de tela de color azul, un pantalón de color marrón y botas del mismo color.

???????: Vamos Ebinarr no puedo esperar más para ver!- Respondió emocionada y desesperada por querer ver que es lo que le quería mostrar Ebinarr.

(N. Autor:  El nombre Ebinarr, significa "único guerrero" o "luchador solitario")

El hombre llamado Ebinarr tenia cabello corto pero desordenado, el cuál era de un color similar al de la mujer solo que un poco más oscuro. Tenia ojos de color gris claro, era muy alto ( aproximadamente más de 1.80 m), tenía una gran musculatura y tenia puesto una camiseta de color azul, encima de esta una especie de chaqueta de color blanco, unos pantalones de color negro y botas de color marrón. 

Ebinarr: Aún no le vas a quitar hasta que lleguemos-Respondió interceptando las manos de la mujer, las cuales estaban a pocos centímetros de la venda que tenia puesta en sus ojos- No seas desesperada- Le regaño Ebinarr a la mujer.

???????: Hump estes tu culpa de que este así- Le contesto haciendo un puchero, que según Ebinarr la hacia ver muy adorable- No puedo creer que aún siendo mi cumpleaños tengo que tener vendas puestas, no pudiste simplemente darme mi regalo y ahorrarte las vendas?- Se quejó la mujer.

Ebinarr: Pues no te las hubiera puesto si no fueras desesperada, y no te regale nada que cueste dinero o vendan en las tiendas pues se muy bien que ese tipo de cosas no te gustan mucho- Contestó serio-(En verdad  . . .nose como me termine enamorando de tí)- Pensó con una gota de sudor.

???????: Pues discúlpeme usted señor seriedad y desconfianza pero a mi jamás me gustaron las cosas caras o de mucho valor- Contesto un poco molesta- Yo prefiero que me den algo que no cueste mucho pero que tenga un gran valor sentimental, que eso que me den representé algo significativo no solo para mí, sino que me siempre me recuerde sin importar donde se encuentre esa persona que me dio el obsequio cada que lo mire siempre me haga recordar  el mismo con amor y cariño- Respondió con una sonrisa radiante que hizo sonrojar a Ebinarr, pero la mujer no pudo ver dicho sonrojo pues aún tenia las vendas puestas.