alumbramiento

88 7 0
                                    

Dos meses han pasado desde la caída del dragón de la tierra y en el reino de Fiore las cosas han sido de todo menos normales. En el castillo real, en los aposentos de la princesa un doctor ayudado por un par de enfermeras le practican una cesárea. Mientras que en Magnolia la hermosa modelo Mirajane Strauss está dando a luz en la comodidad de su hogar, en la tarea le ayudan la DS Wendy Marvell y Porliuska. Ambas mujeres se enteraron hace tan solo un mes que  sus embarazos tenían cierto grado de riesgo, en el caso de Mira se debe a que tendrá gemelas, y en el de Hisui un mal asentamiento del feto provocó que el cordón umbilical se enrolle alrededor de su pequeño cuello por lo que el médico real y Porliuska recomendaron realizarle a la princesa una cesárea o de lo contrario la vida del bebé corre peligro.

Un par de horas después la princesa despierta con algo de pesadez, lo primero que hace es preguntar por su hijo, en la habitación en ese momento estaba sufriendo padre y una enfermera revisando sus signos, Toma Fiore sonrió al verla despierta y la enfermera le informo muy feliz que la operación fue exitosa y el bebé no corre ningún peligro, un minuto después se retiró de la habitación y el doctor apareció junto a la segunda enfermera con su hijo en brazos quince minutos después.

—Le presento a su hijo princesa Hisui dijo sonriente la enfermera, en sus brazos envuelto con una suave sábana de seda color púrpura está un hermoso bebé, tiene un pequeño mechón de cabello color rosa con la punta verde.
—Es precioso ¿No crees papá? Dijo conmovida Hisui mientras recibe a su hijo acunandolo en sus brazos, el niño al sentir el calor del cuerpo de su madre sonrió y soltó una tierna risa
—Si que lo es, ¿Ya pensaste un nombre? Preguntó el rey mientras con el dedo índice de su mano derecha acaricia a su nieto.
— Tú te llamaras Natsu Dragneel Fiore. Dijo la peliverde viendo con cariño a su pequeño. Toma sonrió al escuchar el nombre y le comenta a su hija que en cuanto vuelva el pelirrosa se casarán y ambos serán los nuevos reyes de Fiore. La joven mira a su padre impresionada pues duda que el pelirrosa acepte o que siquiera la quiera. Lo que ella ignora es que en ese momento un pelirrosa contempla el cielo en medio de la nada pensando en una peliverde y en una albina.

Aproximadamente veinte minutos después que Hisui Mira da a luz a sus gemelas, las abraza con todo el amor del que es capaz una madre y un rato después sus amigas y hermana entran a la habitación ya limpia a conocer a las nuevas miembros de la familia
—Son idénticas a ti Mira. Halaga Yukino quien ya no trata a las demás con tanta formalidad.
—Pero tienen un cierto toque de su padre. Agrega Lucy mientras Liss asiente de acuerdo, ambas pequeñas duermen pacíficamente tomadas de la mano en sus pequeñas cabecitas se ve un mechón de cabello bicolor rosa y blanco
—¿Ya pensaste en sus nombres hermana? Le preguntó Lissana mientras acaricia con sus dedos índices de ambas manos a cada una de las niñas.
—La del pelo más claro será Mirajane Dragneel Strauss y la otra será Erzsert Dragneel Strauss. Ambas pequeñas soltaron una tierna risita al escuchar sus nombres pero todas notan que Lissana está llorando, al preguntarle que le ocurre entre sollozos logra balbucear
—Le pusiste a una el nombre de mamá. Mira sonrió con calidez y tomo la mano de su hermana.

Un mes después en la casa Strauss tres jóvenes gritan acostadas víctimas de los dolores del parto. En la misma habitación Porliuska las asiste mientras Wendy y Mira fungen como enfermeras, ajenas a todo el caos a su alrededor en su cuna de caoba -regalo de Laki- las pequeñas Mira junior y Erzsert duermen abrazando un peluche con la forma de Natsu -regalo de Juvia-.

Aproximadamente una hora después tres llantos rompen la momentánea tranquilidad de la ciudad, de la residencia de las Strauss salen dos personas una mujer mayor y una jovencita de cabello azul intenso, mientras que dentro del hogar Strauss Lucy, Lissana y Yukino yacen en sus respectivas camas exhaustas pero felices, finalmente sus hijos nacieron, durmieron sonrientes un par de horas  mientras Mira acuesta a los pequeños en sus respectivas cunas -todas regalo de Laki junto con esposas de madera-, cada cuna tiene grabado el nombre de sus respectivas dueñas, en la tarde las tres mujeres finalmente despiertan y la sonriente Mira le sirve a cada una un plato con comida caliente y recién hecha
—Muchas gracias Mira. Sonríe Lucy
—¿Que haríamos sin ti? Afirma Yukino
—Eres la mejor hermana. Afirma Liss abrazándola por la cintura.
—¿Ya pensaron un nombre para sus hijos? Pregunta sonriente la albina mientras se sienta junto a la cuna de sus bebés y los amamanta. Las tres féminas piensan un segundo y dicen
—Nathaniel Dragneel. Dice Lucy
—Ruby Zeref Dragneel. Afirma Yukino
—Igneel Tatsu Dragneel. Respondé Lissana con los ojos cerrados y una linda sonrisa en su rostro.
—Yuki, no quiero meterme pero tuviste un varón ¿Porqué ese nombre?
—Una tarde Liss y yo paseamos en una tarde de chicas y me confesó que Natsu le contó que tras vencer a Zeref este le contó toda su vida, incluyendo los nombres de sus verdaderos padres, y Ruby era el nombre de su madre; pero no vi problema en llamar así a mi hijo. Mira solo le sonrió y siguió amamantando a sus pequeñas.

A cientos de kilómetros de ahí en una cabaña horas antes, desde la noche anterior una partera atiende con presteza a una joven de largos y sedosos cabellos plateados embarazada, en la madrugada se le rompió la fuente y la partera -anciana con mucha experiencia en lo que a partos se refiere- desde entonces da su mejor esfuerzo para que esté bebé llegué sano y salvo, objetivo que consigue poco después del amanecer. Momento en el que llegaron a cabaña dos hombres, uno de cabello azul y el otro de cabello corto color negro y una fila de cabello mucho más largo pintado de amarillo.

La cansada mujer le pidió a los recién llegados atender a la nueva mamá mientras ella baña al niño. El pelinegro -Sawyer- limpia el desorden rápido mientras el peliazul -Jellal- se sienta junto a Sorano y conversan de nimiedades, al poco rato Sawyer se les une y este añade anécdotas al relato de Jellal sobre sus esfuerzos para eliminar gremios oscuros. Media hora después aparece la mujer con el bebé limpio, se lo entrega a su madre envuelto en una cómoda frazada de algodón a fin de que no parezca frío, Sawyer lleva a la mujer al comedor donde disfruta un merecido almuerzo; el joven al poco rato le lleva comida a Sorano quien lo come gustosa y muy agradecida. Diez minutos después la partera termina de comer y el peliazul le paga entregándole una bolsa llena de Jewels, la mujer agradece y se va.

Sorano en cuanto terminó de comer dió de comer a su bebé,  un lindo varoncito con un lindo mechón de cabello bicolor plata y rosa. Mientras ella amamanta al bebé ambos hombres charlan en la otra habitación, de pronto Jellal lanza una pregunta dirigida a la peliplata
—Y dime Ángel ¿Ya pensaste un nombre para tu hijo?
—No le pondré Jellal si es lo que te preguntas.
—¡No digas cosas así! ¡Si te escucha Erza me mata seguro! Sorano rio como niña y contestó
—Solo bromeó contigo, lo he pensado y se llamará como su padre Natsu Dragneel Agria. Dijo orgullosa, su pequeño solto una alegre risita al oír el nombre y la afirmación de Sorano Jellal se sorprende de que el pelirrosa sea padre de ese pequeño.

Mientras tanto Natsu Dragneel está frustrado, frustrado porque en tres meses de viaje no ha obtenido un solo indicio del dragón del oro, frustrado porque la dragón de la luna no se molestó en darle una mejor indicación que eso.

Mi adorable haremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora