Era un día hermoso. Los pájaros cantaban, las flores florecían... y una dulce chica tenía un objetivo muy importante: hacer galletas.
Detrás de la mesa de la cocina, una adorable versión de Ruby Rose apareció con una sonrisa emocionada. Agarró un huevo con confianza y lo golpeó contra el borde del bol... pero no pasó nada. Frunció el ceño, lo intentó de nuevo, con más fuerza. Nada.
"Mmmm... ¡Sonic, ven aquí!" llamó Ruby con tono urgente.
En un pequeño torbellino, apareció un tierno Sonic, igual de adorable que ella.
"¿Qué pasa, Ruby?" preguntó con curiosidad.
Pero Ruby ni lo escuchó. Siguió golpeando el huevo con más energía, frustrada. Al final, bufó y alzó el cuenco con intención de usarlo como arma contra el obstinado huevo.
"¡Whoa!" exclamó Sonic, tomándola del brazo justo a tiempo. "Déjame ayudarte".
Con facilidad, tomó el huevo, lo rompió con un golpe limpio y dejó caer su contenido en el bol.
"¿Ves? No es tan difícil" dijo con una sonrisa triunfal.
Ruby lo miró entrecerrando los ojos.
"...Suertudo" murmuró, inflando las mejillas.
Un rato después, Ruby tomó la bolsa de harina y la volteó sobre el bol. Pero no cayó ni un gramo. Frunció el ceño, saltó sobre el cuenco y comenzó a sacudir la bolsa con fuerza... hasta que, de golpe, toda la harina salió disparada como una nube blanca.
"¡Aaaah!" gritaron ambos al unísono.
Ruby quedó sentada, completamente cubierta de harina, con una expresión derrotada. Sonic, por su parte, había desaparecido bajo una pequeña montaña blanca.
Avergonzada, Ruby murmuró un quejido mientras se sacudía el polvo.
Después, con disimulo, sacó una bolsa de chispas de chocolate. Tomó una y se la metió a la boca.
"Oh no..." dijo Sonic, cruzando los brazos. "Ruby, ¡nada de trampas!"
Trató de quitarle la bolsa, pero Ruby empezó a zamparse puñados enteros de chispas como si su vida dependiera de ello.
Sonic se quedó mirándola, incrédulo. Ella, concentrada en su botín, tardó en notar la mirada fija del erizo. Cuando se dio cuenta, se detuvo en seco, con los ojos bien abiertos. Con una risita nerviosa, metió la mano en la bolsa una vez más, sacó una chocolatina... y se la ofreció a Sonic.
Él la aceptó sin decir palabra, llevándosela a la boca sin apartar los ojos de ella.
Más tarde, Ruby se disponía a mezclar la masa. Intentó remover el contenido con la cuchara, pero esta no se movía ni un milímetro. Hizo más fuerza, sin resultado. Decidida, se subió a la mesa, colocó los pies a los lados del bol y tiró con todas sus fuerzas... solo para salir volando hacia atrás.
Se levantó enseguida, volvió a subirse y empujó con todo su peso. Pero otra vez, la cuchara la lanzó como si fuera una pluma.
"A ver... déjame intentarlo" dijo Sonic, subiéndose también a la mesa. Le dio una patada a la cuchara. Nada. Cayó al suelo con un golpe sordo.
Ruby Miraba el cuenco, como un depredador que acecha a su presa.
"Creo que lo hare de otra forma", comentó Sonic. Volvió a intentarlo, esta vez con las manos. Y funcionó. La cuchara se movió con suavidad mientras mezclaba la masa con maestría.
Ruby lo miraba con la boca abierta.
"¡¿CÓMO...?!" gritó, indignada.
Un rato más tarde, Ruby se había sentado en el fregadero, comiendo más chispas de chocolate a escondidas. Sonic seguía mezclando el bol, pero esta vez con una mirada de pura desaprobación dirigida a ella.

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RWBY AND SONIC CHIBI
Humorde porque la existencia de esta cosa.... por no se, me parecio divertido, bueno ya se lo saben. Aqui se vera unas de las aventuras mas comicas del Equipo RWBY y el Team Sonic. Sonic: Sega RWBY: Viz Media (Antiguamente Rooster Teeth)