Era de esperarse, es un mono que se le relaciona con la oscuridad, las sombras y la soledad, obviamente estaría solo fuera a propósito o no.
Pero no era común que incluso evitará a Mk, puesto que ya le había tenido la suficiente confianza como para no irse tan pronto el sucesor de su asesino apareciera.
Era extraño, últimamente Macaque se comportaba... Fuera de lo normal.
Evitaba a todos, sus clones de sombras parecían transparentarse más de lo normal a pesar de estar en la oscuridad o en las paredes, el olor a mango mezclado con ciruela era cada vez menos presente y su teatro de las sombras cerró.
Algo estaba mal.
Mk acudió con Sun Wukong, su mentor autoproclamado sabio igual al cielo, buscando algún consejo o guía de que debería hacer, fueron amigos en el pasado debería saber que podría hacer ¿no?
—Niño, entiendo que quieras ayudar a Macaque y que te preocupes por él pero ya sabes las cosas entre nosotros, no podemos estar cerca— no le importó hablar con la boca llena de fideos, asqueroso.
—No digo que vayas y le preguntes que le sucede, estoy preguntando que si él se había comportado alguna vez así en el... Pasado, cuando ustedes dos eran unidos— insistió el de bandana roja.
—... No, él nunca se comportó así, no que yo recuerde, ni siquiera cuando volví al pergamino ví que él se comportará así en el pasado— admitió luego de unos segundos, su boca aún con restos de comida masticada.
¿Qué esperan? Es un mono, no les importa ser así.
Mk dudó un momento, mirando los fideos entre sus palillos, no tenía mucho apetito que digamos.
—Crees... ¿Poder ayudarme a buscarlo? Por favor, estoy preocupado por él, ya no es normal, ni siquiera en él— juntó sus palmas y miro a Wukong con sus famosos "ojos de cachorro", buscando que eso le ayudará en algo.
Wukong hizo muecas y desvío la mirada a otros lados, paseandola entre sus alrededores y su sucesor que mientras más lo evitaba más se acercaba, finalmente cuando su espacio personal fue invadido soltó un suspiro de resignación y se terminó sus fideos, dejando el empaque con los palillos a un lado —bien, bien, tú ganas, te ayudaré ¡pero que quede claro que es en contra de mi voluntad!
Mk asintió con una sonrisa y tomó la muñeca de su mentor, saliendo disparado de la cueva de entrenamiento en la que estaban, Wukong apenas fue capaz de ver el cello protector antes de caer por la cascada, ahora sabía que se sentía ser jalado.
Nunca volvería a jalar a alguien así.
Apenas llegaron a tierra Mk lo soltó, mientras su maestro se componía y limpiaba luego de tal arrastrada se quedó mirando a sus alrededores, observando y escuchando con atención, tratando de escuchar algún ruido que fuera por parte del mono azabache.
Wukong gruño y terminó de estirarse para luego quitar la tierra de su ropa, haciendo una ligera mueca cuando sentía la tierra en su pelaje, no era una sensación linda.
Al notar a su sucesor tan atento a su alrededor no pudo evitar bufar con diversión y activó su visión dorada, imitando a su sucesor.
No pasó mucho hasta que vio un rastro púrpura cerca de unos árboles, bingo.
Aunque... Había algo raro en ese rastro, lo había visto antes, sabía que era Macaque pero...
—Lo tengo, kid— avisó, el sucesor lo volteó a ver para luego dirigir su vista a donde miraba su mentor, sonrió con alivio y corrió, adentrándose en la flora de flower fruit mountain seguido de Wukong.
