Diarios de Shadow (Sonadow/Shadonic) - PAUSADA

Capítulo 24: Hermandad, Parte 1

Fecha: 28 de marzo del 2009.

Narrador:

La media noche envolvía la tranquila casa de Tails y Sonic en una atmósfera de paz y sosiego. Ambos hermanos dormían plácidamente cuando un insistente golpeteo en la puerta rompió el silencio de la noche.

Tails se sobresaltó ligeramente en la cama, frunciendo el ceño por el ruido inesperado. Sonic, aún medio adormilado, se levantó de un salto y se dirigió hacia la puerta, seguido de cerca por Tails.

Al abrir la puerta, se encontraron con la figura de Knuckles, parado frente a ellos con una expresión preocupada en el rostro.

"¿Knuckles, qué demonios haces aquí a estas horas de la noche?" preguntó Sonic, dejando ver su sorpresa ante la visita nocturna de su amigo.

Knuckles respiró hondo, tratando de mantener la compostura mientras explicaba rápidamente la situación. "¡Hola chicos! Los reporteros están acampando frente a mi casa después de que se filtrara la noticia sobre mi compromiso con Rouge. No puedo volver allí en este momento".

Los hermanos intercambiaron miradas comprensivas, asimilando la gravedad de la situación. Sin dudarlo, invitaron a Knuckles a entrar y le ofrecieron un lugar para quedarse.

"Por supuesto, Knuckles. Te puedes quedar aquí todo el tiempo que necesites," dijo Tails, con una sonrisa reconfortante.

Knuckles asintió con gratitud, agradeciendo a sus hermanos por su apoyo.

Knuckles observó a sus hermanos con curiosidad mientras se acomodaban en la sala de estar. "¿Qué están haciendo a estas horas de la noche?" preguntó, tratando de romper el silencio.

Sonic, con una sonrisa burlona, respondió: "Oh, solo estábamos practicando nuestras habilidades de insomnio para una competencia en la ciudad, Knuckles. ¿No te enteraste?".

Antes de que la situación pudiera empeorar, Tails intervino con un zape rápido en la cabeza de Sonic. "¡Cierra la boca, Sonic!" le espetó, lanzándole una mirada furiosa. "Knuckles necesita descansar, no tus tonterías".

Sonic, con una mueca de fastidio, se levantó de su asiento. "Tienes razón, Tails. No vale la pena hablar con un tonto", gruñó, dirigiéndose hacia la habitación de Tails con pasos pesados.

Knuckles, notando el sarcasmo y la grosería de Sonic, se volvió hacia Tails con preocupación. "¿Pasa algo con Sonic? Parece más amargado que de costumbre, es como si volviera a su adolescencia", preguntó, frunciendo el ceño.

Tails suspiró, sintiéndose incómodo por no poder revelar la verdad a su amigo. "Sonic solo está... cansado. Está pasando por un momento complicado, Knuckles. Pero no puedo decirte más", respondió, deseando poder dar una respuesta más completa pero sabiendo que no le correspondía contarle el secreto de Sonic.

Knuckles asintió con comprensión ante las palabras de Tails y, sin decir una palabra más, cargó a Tails en brazos y lo llevó hasta su habitación en donde estaba Sonic. Arrojó a Tails a la cama y luego se lanzó sobre ambos, abrazándolos con fuerza.

Al principio, Sonic se sintió un poco molesto por el repentino asalto de su hermano, pero pronto se vio contagiado por las risas de Tails cuando Knuckles comenzó a hacerles cosquillas. Aunque trató de mantener su fachada de irritación, Sonic no pudo evitar reírse mientras luchaba por liberarse de las manos de Knuckles.

"Knuckles, ¿qué demonios estás haciendo?" preguntó entre risas.

"Solo un poco de hermandad, Sonic. ¿No es lo que necesitamos?" respondió Knuckles, riendo.

"¡Claro, claro! Por favor, deja de hacerme cosquillas", exclamó Sonic, tratando de contener la risa.

"¡Ja, ja! ¡Knuckles, suéltame! ¡Mis costillas!" rió Tails.

Después de un rato, Knuckles se detuvo y se acostó en la cama junto a sus hermanos, abrazándolos con ternura.

"Ustedes saben que siempre estaré ahí para ustedes", murmuró Knuckles con sinceridad. "No es necesario que me cuenten todo, pero si necesitan distraer sus mentes solo por unos minutos, cuenten conmigo".

Una sensación cálida y reconfortante se apoderó del pecho de Sonic mientras escuchaba las palabras de su hermano. Con un susurro apenas audible, Sonic dijo: "Gracias", antes de dejarse llevar por el sueño, abrazado por el amor y la protección de sus hermanos.