9 parte 2

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Una pareja entra, ordena y sale.

"Cuando llegué a casa después del accidente de Cher, eran casi las diez de la mañana. No fue como si sintiese que fuese tarde a causa de las gruesas nubes grises que tapaban el sol. Pero llegué a casa a las diez, y tu estabas esperándome, parado en frente de la puerta con una toalla, una taza de te, y una larga conversación por venir.

-Louis está en mi departamento- dijiste, con el ceño fruncido -. ¿Qué mierd*a esta pasando por tu cabeza?

Me encogí de hombros y me abrí de paso hacia la cocina. Te las arreglaste para pasar la toalla sobre mis hombros mientras pasaba.

-Cortar mi cabello – dije brevemente.

Tú me viste mientras me preparaba el desayuno- avena y pan tostado, no muy difícil. Mi cabeza estaba empezando a latir dolorosamente. Estaba empezando con la resaca, una de esas que pasan cuando no duermes durante toda la noche y sientes como si estuvieses contantemente golpeando tu cabeza contra una muralla."

Me estremesí en simpatía y tomé un sorbo de mi café, quitando el amargo sabor que venia a mi boca cuando piensé en una resaca.

Cada vez que teníamos una resaca, y al otro día teníamos una entrevista, Harry preparaba su receta anti-resaca. Avena, pan tostado y jugo de naranja.

"Notaste mi resaca cuando encendiste la luz y fuiste al baño en busca de un paracetamol. Me diste las dos pastillas con un suspiro y te inclinaste sobre el mesón.

- ¿Qué esta pasando contigo, Harry? – Me preguntaste, mientras el agua de la avena empezaba a hervir – Estas actuando muy raro.

Te dije que estaba bien.

Me diste una de tus miradas de "sé que me estas mintiendo pero voy a dejarlo pasar por esta vez" y empezaste con el reproche"

Todos hemos tenido de esas charlas con Liam. El nombre de 'Daddy Direction' no es solo para la televisión- Liam de verdad es como una mamá con nosotros. Generalmente con Harry es mas duro. Pero siempre eran bien intencionadas, por un sincero deseo de hacer el bien con nosotros.

Pero Harry tenía un punto a favor. Las discusiones con Liam solían ser repetitivas, ¿y después de la noche que había tenido Harry? Estoy seguro que un reproche era lo último que necesitaba.

"Sinceramente, me desconecté. Me habías dado tantos reproches durante cuatro años, así que para mi, todas sonaban iguales. No estaba de ánimo para escucharte, así que no lo hice.

Hablaste por unos buenos diez minutos sobre la responsabilidad, sobre la banda, sobre nosotros. Hablaste de mi cabello y de mi comportamiento y como estaba tomando todo por sentado, como sería si yo me enfermaría y cuales serían las consecuencias para la banda, una docena de cosas que yo ya sabía de antemano.

Pero luego trajiste mi reputación a la conversación.

Tal vez pensaste que estabas ayudando- velar por mi cuando nadie más lo hacía. No lo sé. Nunca lo sabré. Pero eso fue lo que me derribó.

Ahí fue cuando me enojé. Te dije que te fueras a la mierd*a y que te metieras tus reproches donde no entraba la luz del sol.

Tú también te enojaste- y me gritaste. Me gritaste insultos, y finalmente, cuando terminaste, me miraste y dijiste una ultima cosa antes de irte.

-Eres un marica de mierda, Styles. ¿Por qué eres el líder? No tengo ni la más puta idea.

Mis dedos aprietaron la mesa, con rabia.

La puerta del café se abrió, dejando pasar a otro cliente.

"Jenna, no tenías idea sobre como aquellos simples rumores que inventaste en Holmes Chapel me afectarían, años después. Pero lo hicieron.

Liam, tú también lo pensabas. Al menos, espero que lo hagas. Nunca dirías-"

Una mano fue a parar sobre mi hombro, como cuando Niall lo hizo.

- ¿Todo bien, Kate? – preguntó Liam suavemente.

Me levanté y lo golpeé lo más fuerte que pude, dandole una cachetada. El walkman, las cintas, y el libro de Keats calleron al piso. Liam dio un paso hacia atrás, llevándose una mano a la cara.

-Bien, me merecía eso – dijo, frotándose el lugar donde mi mano hizo su primer impacto.

Dejé de mirar sus ojos y su nariz y golpeé con fuerza su mejilla, nuevamente. Mis dedos estaban rojos, igual que mi palma. Liam hizo un intento para tomar mi mano, y luego la inspecciona.

-Vas a estar bien – dije finalmente -. Ahora escúchame.

Me relajé lentamente y lo miré directamente a los ojos.

-¿Alguna buena explicación?

Liam se encogió de hombros.

-Quizás, no lo sé. ¡Janet, estoy bien!

Janet nos miraba sospechosamente, pero luego volvió a mirar al mesón.

-Yo no sabía, pensé que estaba ayudando.

-¿Marica?

Hizo una mueca.

-Perdí mis estribos. No debería haberlo hecho. Pero ninguno de nosotros lo sabía, y no teníamos ideas para poder adivinarlo. Estaba intentando ayudar, asegurarme de que no se perdiera. Pero no sabía que ya estaba perdido. No tenía idea de cuanto le iba a doler – de pronto, Liam se ve viejo y cansado. Se frota los ojos -. Cometí un gran error. Todos lo hicimos, pero fui mayoritariamente yo.

-¿Cómo me encontraste? – dije, en vez de decir una docena de acusaciones que quería decir. Estoy mas adelante en las cintas, quizás hice algo más malo.

-Niall me envió un mensaje. Me imaginé que deberías estar aquí ahora. Nadie debería escuchar estas cintas solo. Sobre todo tú – su mirada se posó en el libro que estaba en el piso -. ¿Me prestas eso? Lo voy a leer un rato mientras escuchas. Acabas de terminar mi cinta ¿no?

-Casi, me falta un pedazo – Liam tomó el libro y se dirigió a una de las mesas cerca de los walkmans -. Liam, ¿por qué estas haciendo esto?

Liam no respondió de inmediato, en vez de eso, giró el libro de Keats.

-La cagué con Harry, no voy a dejar que pase con el resto de ustedes.

Me puse de pie, con mi café en la mano.

-Caminemos entonces.

Liam hizo girar un juego de llaves que lleva en la mano.

-O podemos conducir, solo... termina mi cinta. Luego iremos adonde quiera que quieras ir.

Me sienté de nuevo y retrocedí un poco- la cinta había seguido mientras yo conversaba con Liam.

"-pensabas. Al menos, espero que lo hagas. Nunca dirías algo para herirme. Estabas cansado y querías que tu amigos fuesen como antes, antes de todos los problemas. Tenías tus manos llenas esa noche- Kara rompiendo con Niall, el extraño comportamiento de Zayn después de irse rápidamente, Kate y Louis probablemente más borracho que la mierda, yo desapareciendo y volviendo sin pelo, tu matrimonio, el nuevo tour, la lluvia... estabas cansado y querías arreglar todo lo que estuviese a tu alcance.

Pero estabas intentando arreglar el problema equivocado. Usando el remedio equivocado para la herida equivocada. Pensaste que estaba perdiendo el enfoque, no a mi mismo.

Cuando te fuiste, me deslicé por la pared para sentarme en el piso. Lloraba mientras reía, con hipo, y probablemente me veía horrible, con mocos y todo eso. La cocina estaba hecha un desastre, con la avena rebalsando, quemándose.

No sé por qué recuerdo eso. La avena quemándose, me refiero. Me levanté para limpiar el desorden, y mis lágrimas cesaron.

Otra cosa más que no pude hacer bien.

Fin de la cinta siete.

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