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Regulus miraba con el ceño fruncido y ojos enrojecidos las cebollas como si eso hiciera que estas se cortaran de forma correcta, james por otro lado veia con diversion al muchacho black luchar por cortar las cebollas
—porque lloro? no me gusta..—murmura regulus secándose los ojos nuevamente, le lanza un reparador a James cuando esté se ríe por lo bajo
—no seas agresivo, Reggie, las cebollas hacen llorar...si quieres yo las corto y tú te encargas de hacer la masa para la pasta, que dices?— habla suavemete james parandose detras de el, apoyando su menton en en el hombro del ex slytherin, regulus se sonroja un poco ante la cercanía
—¿Tengo cara de que se hacer una masa para pasta?— el muchacho volteo un poco el rostro para ver a james no esperando que esto hiciers que sus rostros queden tan juntos, ambos se quedaron viendo a los ojos, en completo silencio admirandose el uno al otro
—bueno...tienes suerte de que esté aquí, te enseñaré— murmura por lo bajo James sintiendo su corazón acelerarse ante la cercanía que compartía con el hermanito de su mejor amigo, agarra los ingredientes— primero debes poner todos los secos...—empezo a darle instrucciones
Regulus empezó a seguir los pasos con el ceño fruncido, por alguna razón su rostro termino con harina al igual que su bonito cabello, James reprimio una sonrisa admirando la belleza desprolija del menor, Reggie por otro lado hacia una pequeña mueca mientras amasaba
—james creo que hice algo mal, se me pega todo a las manos—murmura sintiéndose incómodo por la harina pegajosa, era muy quisquilloso con las texturas, sabores, olores...con todo en general
—esta bien Reggie, tienes que amasar un rato para que se despegue—le explica suavemente, agrega un poco más de harina y el moreno agrega sus propias manos para amasar junto a regulus, ambos corazones latian en sincronía
Luego de una hora mas o menos, ambos muchachos terminaron de cocinar y estaban emplatando, James se encargó de hacerle una salsa blanca a regulus porque no era tan condimentada como la boloñesa que preparo para el resto de la casa
—sentimos un olor riquísimo así que bajamos—admite Mary mientras bajaba cargando en brazos a un pequeño harry que jugaba y tiraba de su cabello riéndose—si que te gustan mis ricitos eh Harry?
En respuesta el pequeño solo soltó un chillido emocionado, al rato baja Lily bostezando ya que se había dormido una siesta mientras su novia le hacía el favor de cuidar a Harry, se sientan todos a comer y como niño pequeño buscando aprobación, regulus miro atentamente las reacciones de todos a comer, sonriendo satisfecho al escuchar los jadeos de satisfacción al comer comida rica, recién ahí regulus empieza a comer
El comía con cuidado de no mancharse, de no tirar comida, de no ser ruidoso, de no ser demasiado vistoso, los traumas de la infancia, alza la mirada al oir una risa, junto a Mary y Lily empiezan a reírse al ver a tanto harry como james con la boca llena de salsa, le sorprendia lo parecidos que eran esos dos, obviamente quitando los ojos verdes de Lily
