New Orleans⠀!

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¡Ah, la preciosa ciudad de Luisiana! Es el año de 1930, las calles estaban llenas de música y ritmo, era imposible no contagiarse con las maravillosas melodías que ahí sonaban, New Orleans era bien conocida por sus festivales, la música y claro, los deliciosos platillos. Paso a paso Alastor se va haciendo camino a su departamento, no era un edificio muy grande donde vivía exactamente, dos pisos, donde él iba hasta el segundo para descansar, sin duda una comodidad enorme no tener que lidiar con tantos vecinos discutiendo, pasando de aquí por allá haciendo escandalo sobre el techo, tampoco se encontraba mucho con los residentes del departamento de abajo, evitaba así tener charlas innecesarias, aunque eso no solía ser un problema para nuestro locutor favorito, pues su facilidad de hablar y su agradable tono de voz no sólo lo llevó a ser un locutor de radio reconocido, también ha ayudado a ganarse a la gente con su carisma y elocuencia.

El moreno utiliza las llaves para entrar a su espacio, mostrando incluso a solas una sonrisa galante ¿Y cómo no estar contento? Vivía solo, tenía el trabajo de sus sueños, era adorado por sus queridos oyentes, salía cada vez que podía a su bar favorito, uno cerca de su domicilio donde tocaban música exquisita, y sobre todo... ha estado cometiendo asesinatos sin levantar sospecha alguna ¿Cómo no mostrar buen humor cuando todo salía perfecto?

En cuanto está dentro de su departamento se asegura de poner seguro a la puerta, para luego quitarse el saco, impaciente por empezar a hacer una de sus actividades favoritas, la cocina. Una vez está lo suficientemente cómodo se aproxima a prender la radio, oh, su estación favorita, Jazz todo el día, las mangas de su camisa arremanga para finalmente ir a la cocina, busca los ingredientes necesarios, papas, crema, leche, sal, pimienta, mantequilla para crear un delicioso puré ¿Y que iba acompañar a ese puré? Algunas verduras, no tarda en lavarlas y picarlas, algunos pimientos y cebolla, al sarten junto a un chorro de aceite y su parte favorita, la carne, es carne de calidad, claro, él se aseguró de elegir a una linda señorita la última vez que salió a beber, era preciosa cuando la conoció, pero carecía de modales, la vio burlándose del grupo que estaba tocando esa noche, su paciencia estaba al límite cuando sin vergüenza alguna lanzó una copa al pianista, no soportó verlo y se acercó "amablemente" para tener una charla e invitarla a salir, ella accedió al notarlo tan apuesto, grave error, ahora es parte de la cena de Alastor, al menos está siendo degustada con una copa de vino, se aseguró de comprar de la misma marca que ella había lanzado.

¿Me Recuerda? | RadioappleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora