Start or Game over?

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Un mundo en donde todo está acabado, en donde ni es más poderoso héroe puede vencerme, un mundo en donde conseguí aquello que más anhelo, la venganza.

Me reí, saboreando la victoria. No puedo explicar la satisfacción que me genera la imagen que tengo enfrente, Los Loud, mi supuesta familia, vencida.

Ignorando los lamentos de las personas que intentaban salir de los escombros del edificio bajo mis pies, me propuse deleitar la vista.

No hay mejor vista que esta, la cuidad destruida y en llamas, y yo…en la cima.

—¿Estás feliz?—Me gire a ver al dueño de esa voz, mi padre—Ya has conseguido eso que querías, destruirlo todo.

Sonreí con sorna, satisfacción, orgullo.

—Oh, no, te equivocas.—Dije, viendo como la sangre caía de sus heridas. Mi sonrisa se ensanchó y eso provocó su enojo—No quería destruirlo todo, yo sólo destruirlos a ustedes.—Mire a mi alrededor con desdén—Bueno, los daños colaterales siempre son una posibilidad ignorada.

Mi padre apretó los labios, sus manos se cerraron en puños y sus nudillos quedaron blancos. Su reacción me provocó una risita divertida y burlona.

—No te reconozco, Lincoln.—Otra voz, mi madre—Yo no te crie para ser un villano.

Me reí sin poder contenerme. Las expresiones de mis padres expresaban su confusión y enojo, no tenían idea de como es que podía reírme con la seriedad del asunto.

—¿Me has criado? Hmm...—Hice como si pensará y mire como mis hermanas Leni, Lynn Jn y Lori, empezaban a removerse en el suelo, despertando—¡Ah, ahora recuerdo! No, no me has criado. Era tu hijo sin importancia, ¿verdad?

Mi madre apretó los labios, disgustada con la verdad que quería pasar por alto.

Mis hermanas se tambalearon al levantarse, sujetando partes de sus cuerpos que estaban lastimadas. Sus ropas estaban manchadas de sangre y polvo.

Mi mirada se volvió más oscura y mi expresión fue seria, observe a la familia Loud que estaban frente a mi, viéndome como si fuese el peor de los villanos.

—Que lástima, después de tantos años, de tantas oportunidades que tuvieron para redimirse y cambiar.—Guardé silencio, usando un tono frío y cortante—No debí haber desperdiciado ese tiempo.

Sus miradas fueron de desagrado, enojo e impotencia.

—No puedo explicar la satisfacción que me genera verlos así, siendo lo que siempre fueron, unos malditos corderos que se creían lobos.—Sonreí con malicia y burla.

Mi comentario termino por provocar a Lynn Jn, quién se lanzo a mi gritando del enojo. Los gritos de mis hermanas restantes y de mi madre, no bastaron para detenerla.

Uso su poder de velocidad para correr hacía mí, levantando el bate de béisbol que usaba como arma.

Ante de que el bate diera contra mi, use uno de mis brazos para bloquear el ataque y detenerlo, mientras que con el otro la tomaba del cuello.

—Ser tan terca y orgullosa...—La mire sin compasión, viendo la desesperación que había en sus ojos—Será la causa por la que mueras.

La Nieve RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora