Esperando a su sueño

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Noa es una chica de 20 años, nació en Italia, pero vive en España con su hermana. Es alta, tiene el pelo rubio y largo, tiene los ojos medianos, la boca también mediana y tiene las orejas y la nariz pequeña. Su sueño es ser modista como su madre, ahora mismo ha abierto una tienda con su amiga Carla.

Carla es una chica de 21 años, Noa y Carla se hicieron amigas porque las dos quieren ser modistas. La tienda que tienen ellas dos no es muy grande, pero está bastante bien para estar comenzando en el mundo de la moda.

Un día cualquiera decidieron quedar un poco más pronto para ir a desayunar y ya después abrir. Cuando Noa y Carla despertaron para ir a desayunar, las dos decidieron encontrarse en la tienda.

-Buenos días, Noa, ¿cómo estás?- dice Carla.

-Buenos días, Carla, estoy muy bien, ¿y tú?- Contesto Noa.

-También muy bien- sonrió Carla.

De repente llego el camarero y les atendió. Cuando terminaron de desayunar decidieron coger un taxi las dos para abrir la tienda. Una vez en la tienda la abrieron y prepararon todo para atender a los clientes.

De repente entro una de las mejores amigas de Carla y Noa

-¡Hola!- dijo alegremente Valeria.

-Hombre hola Valeria- contesto felizmente Noa.

-Me alegro mucho verte- dijo Carla.

-¿Cómo tú por aquí por España?- pregunto Noa.

-Estoy visitando a mi familia- contesto Valeria.

Noa y Carla estaban muy sorprendidas porque no se esperaban que de repente apareciera Valeria porque hacía cinco años que no la veían.

-Veo que os está yendo muy bien la tienda- dijo felizmente Valeria.

-La verdad es hace poco que la abrimos- afirmo Carla.

-Bueno, chicas me tengo que ir a visitar a mi familia que aún no he ido a saludarles- se despidió Valeria.

Cuando Valeria se fue de repente entro un hombre y se puso a mirar la ropa.

-Noa, ¿tú no notas un poco raro a ese hombre?- pregunto Carla.

-La verdad es que no, pero le voy a preguntar que busca- contesto Noa.

Noa se acercó al hombre.

-Hola, ¿necesitas algo?- pregunto Noa.

-No, gracias- contesto el hombre algo nervioso.

Y en eso Noa se fue a hablar con Carla.

-La verdad es que se nota un poco nervioso- dijo Noa.

Y el hombre de repente se fue a la segunda planta.

El criminalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora