«←★→»
—Bien, hablaré con ella por teléfono antes de ir, no quiero que de verdad le de un infarto.- murmuró el petiso mientras seguía comiendo de las tostadas que le daba el alfa, y Ivan solo asintió.
(...)
Rodri miraba las calles, estaban andando hacía la casa de su madre. Ya había hablado por teléfono con ella, y no le fue muy mal, solo tuvo que aguantar una hora de llantos y sermón de su parte.
Se lo merecía y lo sabía, Tania confesó estar muy angustiada por los meses en que no recibió ningún mensaje de su parte, e incluso estaba a punto de llamar la policía para reportarlo como desaparecido.
Por suerte no lo hizo, Rodri tuvo que disculparse hasta el cansancio, diciéndole que iba a visitarla y no lo haría solo, iba a ir con dos personas más.
Ella le había preguntado quiénes eran pero Rodrigo solo le dijo que aguardase un poco, solo deseaba que de verdad no le fuera a dar un infarto. Decirle que tenía alfa y una cachorra no era algo que se podía hacer a través de un celular.
Así que tenía que hacerlo frente a frente.
Guió al azabache por las calles hasta llegar a la pequeña casa en donde vivía su madre, como Rodri vivía solo y tenía un pequeño apartamento, había ayudado a su madre a comprarla, siempre quiso sacarla del espacio cerrado donde creció.
La casa no era grande, pero era mejor que solo una habitación pegada a otras habitaciones.
Tocó el timbre y esperó a que fuera abierto, pasos se escucharon y a la puerta abrirse una cabellera rubia se asomó. Allí estaba la Omega rechonchita que lo había traído al mundo, ella tenía una sonrisa en el rostro.
Sonrisa que se borró al ver a la persona a su lado, ella miró al azabache de arriba a bajo, después se fijó en la pequeña cachorra que chupaba su dedo sin prestarle atención a nada.
—Rodri...- su madre dijo con un hilo de voz, ni en cien años se habría imaginado algo así, Rodrigo tragó saliva sintiendose nervioso.
La mayor los dejó pasar y los llevó a la sala, Ivan y Rodri se sentaron en el sofá. El azabache no había dicho ni una palabra desde que llegó, de repente se sintió algo intimidado, lo que quería ahora era darle una buena impresión a su suegra.
Ella era muy parecida a su hijo, su color de ojos, eran verdes como los de Rodri, solo que era un poco más bajita y gordita.
La mayor llegó con tres tazas de té, y se sentó al frente de ellos, no eran tan idiotas como para saber que ella sabía que el petiso estaba enlazado. El aroma del alfa estaba mezclado con el del Omega, era fácil de saber en realidad.
—Así que ésto era lo que quería decirme...- Rodrigo asintió, tomando un sorbo de té, no quería que su madre se tomase las cosas mal.
—Sí mamá, él es Ivan Buhajeruk y ella es Melody Buhajeruk.- presentó a los amores de su vida, la pequeña Melo dejó su dedito cuando escuchó su nombre y miró al casta.
—¿Mamá?- preguntó la pequeña, se fijó en la casta, era como su mamá, solo que algo diferente, extendió los brazos hacia ella mientras sonreía.— ¡Baba!
—Melo, ella es tu abuela.- murmuró el petiso con una sonrisa, mientras estiraba su mano y acariciaba los cabellos de la pequeña. La cachorra solo sonrió por los toques y ronrroneó disfrutando de ello.
ESTÁS LEYENDO
¿Mamá? ➼rodrivan
FanfictionPorque Rodrigo, siendo cuidador de cachorros en una guardería, se encariña tonto con la cachorra de uno de sus clientes que le dice mamá. esto es una adaptación de un fic katsubeku ©zaorycast