Lo siento

229 11 53
                                    

En medio de una habitación iluminada por la luz de la luna, Chelsea sostiene el cuchillo en sus manos temblorosas. El brillo metálico refleja su rostro lleno de dolor y arrepentimiento. 

Ruby y ella alguna vez fueron amantes apasionadas, pero esa noche una discusión acalorada desencadenó un giro trágico en su historia de amor.

Chelsea ya no quería mas peleas, ya no quería esconderse. Pelear contra Ruby, su mas grande amor y esconderse de las personas...Ruby había negado múltiples veces su gran amor por la pelirroja frívola. 

Ya no mas, piensa Chelsea.

Las lágrimas corren por sus mejillas mientras sus ojos se encuentran con los de Ruby y aquellos ojos que solían brillar con timidez y ternura, ahora la miran con sorpresa y horror. El silencio pesado se cierne sobre ellas, solo interrumpido por el latido acelerado del corazón de Chelsea y el ruido de las ramas golpeando su ventana.

Ruby no pronuncia palabra alguna, solo observa con incredulidad a la mujer que una vez amo tanto. 

En un instante fugaz, el cuchillo se desliza por el aire y el terror se refleja en los ojos de Ruby mientras el filo corta su cuello. Un hilo de sangre empieza a brotar salpicando las mismas ventanas.

La oscuridad y el silencio se ciernan en esa habitación  que contrasta con el brillo de las lágrimas en los ojos azules de Chelsea.

El arrepentimiento la consume en cuanto dicha sangre boto sobre sus aperladas manos mientras Ruby se desploma lentamente, sosteniendo su cuello degollado con desesperación. Chelsea cae de rodillas frente a ella, abrumada por la magnitud de lo que ha hecho. Los recuerdos de su amor compartido la invaden, embargándola de remordimiento y tristeza.

Mientras Ruby se desvanece lentamente en aquel charco de su propia sangre que tambien llega hasta las rodillas de Chelsea, su último aliento se mezcla con el susurro de un perdón no dicho. Las lágrimas de Chelsea caen sobre el rostro pálido de su amada, sellando así el destino de un amor que se desvaneció en la oscuridad de la noche.

El Sol se eleva en silencio, encontrando a Chelsea arrodillada en soledad, con el peso de su acción marcando su corazón para siempre. Es un hermoso nuevo día, pero para Chelsea, la sombra de aquel trágico final sigue presente, recordándole la fragilidad de un amor que se rompió en mil pedazos.

El cuerpo de Ruby fue encontrado por su madre Agatha con un mensaje escrito con la sangre de la victima;

"Lo siento"


Lagrimas de un Amor Perdido (Chelby)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora