capítulo 6

16 2 2
                                    

Gael tocó la puerta del trastero con los nudillos esperando la respuesta del indigente, que abrió la puerta aún somnoliento

— disculpe que le moleste es que a las 10:30 vienen a limpiar los pasillos y no quisiera que le andaran  molestando —

mintió Gael para que indigente abandonará el trastero.

— muchas gracias hijo que dios te lo pague, está noche intentaré quedarme en otro lado, no quiero abusar, me has dado justo lo que necesitaba—

El indigente extendió la mano, Gael la observo durante unos segundos y se la estrecho, el indigente desapareció por el final del pasillo con su mochila  cuestas y dejando en el aire aquella frase que intrigó al agente.
Gael comenzó a rebuscar en la estantería, en los cajones del escritorio, en el cofre, en busca de algún recuerdo que pudiera llevarse a su casa, pero solo vea material de oficina y libros sobre espereologia que estaban llenos de polvo, se dirigió hacia ellos, dio un soplido y cojio algún que otro libro, ojeo alguno que le llamó la atención, cuando de repente, algo cayó sobre una de las baldas de la estantería, echó la mirada rápidamente y vio lo que parecía una especie de libreta dentro de un plástico, Gael lo observó y sacó aquella libreta de su envoltorio, la abrió para descubrir de qué se trataba, pero a penas pudo alcanzar a leer la primera línea cuando un ruido le alertó de que el personal de limpieza habia comenzado su turno. El agente se escondió la libreta en la espalda y salió del trastero 27.
El turno de mañana en la comisaría de dos ríos se centró en patrullar algunos barrios problemáticos de la ciudad donde la jornada pasó sin demasiados apuros hasta el final de la misma. De camino a casa Gael esperaba encontrarse con aquel indigente, pero supuso que pensaría que abusar de su buen hacer no sería correcto. Cuando llegó a casa ojeó aquella libreta y aúnque sospechaba lo que podía ser, aquello le dio un vuelco al corazón, en efecto se trataba de la libreta del dependiente firmada de su puño y letra, la misma que según el informe policíal había desaparecido hace 20 años aquella noche, pero ¿Porque guardaba su padre entre sus cosas la libreta de aquel hombre?. Gael sintió que solo una persona podía tener la respuesta a esa pregunta, salió de casa, cogió el coche y condujo durante unos minutos, hasta que llegó a un edificio de pisos, aprovecho que una persona salía del portal y así entrar el, quería coger por sorpresa a la persona que había ido a ver, se plantó ante la puerta del piso y llamó al timbre un par de veces , la puerta se abrió

— Gael, ¿Como tú por aquí?. Pasa coño no te quedes ahí —

dijo la persona que le abrió la puerta

— buenas noches Jesús, siento molestarte a estas horas pero creo que tienes que ver una cosa.

— si claro dime ¿qué es? —

preguntó Jesús mientras se sentaba en el sofá. Gael cogió la libreta y se la lanzó a la mesa, Jesús la miró extrañado, no sabía de lo que se podía tratar, hasta que la abrió, leyó la primeras líneas, pero cuando continuó leyendo, su expresión fue de preocupación y sorpresa al mismo tiempo

— ¿que coño haces tú con esto Gael? —

el inspector López se levantó del sofá como un resorte.

— hace 20 años tu redactaste el informe final de aquel caso en el que decías que tanto la libreta del dependiente como la nota, habían desaparecido —

Continuó diciendo Gael mientras el inspector seguía ensimismado.

— un momento, como sabes tú lo del informe, lo leíste el otro día ¿verdad?

Gael asintió

— estaba entre las cosas de mi padre en un trastero, mira suspendeme si quieres pero entenderás que me lo estoy empezando a tomar como algo personal.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 17 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El GrupoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora