Capítulo 2- Una nueva vida

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"QUE"?!

Esa fue la reacción de Draco al notar la habitación vacía, miró a Blaze y le cogió en brazos para sentirse mejor, no sabía que había pasado...la guitarra, las fotos, todo había desaparecido, no quedaba nada...

Draco dejó la mochila pensando en preguntarle a su madre cuando volviese a casa, no podía dejar de pensar en la guitarra de su padre, no podía perderla, se sentía muy vinculado con ella.

Estaba muy triste, pero sus emociones cambiaron rápidamente al oír a alguien en la habitación de al lado, específicamente en la suya.  Se asustó, ya que sabía, que su madre no llegaba hasta la noche.

Se escondió con Blaze en el armario intentando hacer el mínimo ruido mientras escuchaba los pasos acercándose, pero en ese momento  recordó una cosa... había dejado su mochila en el suelo de la habitación...
se escuchó una voz casi adulta.

-Quién está ahí?!

Draco intentaba hacer el menor ruido posible pero se golpeó en la cabeza haciendo bastante ruido. Se congeló por el miedo y ocultó a Blaze en su bolsillo ya que era bastante pequeño.

Draco vio como un chico pelirrojo abrió la puerta y lo cogió por el brazo con fuerza.

- ¡No estoy jugando al escondite, niño!

Le sacó del armario y le metió a un coche mientras que otra persona le ponía una venda en los ojos.

Draco tenía mucho miedo, su respiración era claramente pesada e intranquila, hasta que  notó una mano en su hombro derecho y notó una voz proveniente del mismo lado.

- Hey chaval, no vamos a matarte...supongo, tienes potencial, así que no tengas miedo, soy Larry, ¿cuál es tu nombre chaval?

-D-Draco...

Otra persona que Draco notó en el volante  le interrumpió.

-Silencio mocoso, o Draco, como te llames, una palabra más y te ahorco. Mi nombre no te interesa y tú a mi tampoco me importas.

Draco sintió aún más miedo pero el recién conocido Larry le puso el cinturón y le calmó.

-Disculpa Draco, el es mi hermano mayor Lawrie, es un poco borde... yo tengo 23 años y el 24, el copiloto se llama Chester, básicamente el que te encontró, tiene 27, ya los conocerás después.

-Si quieres  dale también nuestra dirección y nuestra  cuenta del banco idiota.

Esas fueron las frías palabras de Lawrie, con su habitual expresión malhumorada, aunque Draco no la pudiese ver.

Draco decidió que sería mejor estar callado por el resto del camino...

Pasaron varios minutos hasta que el coche paró, Larry guió a Draco por los hombros ya que el todavía tenía la venda en los ojos. Después de oír la puerta abrirse y seguidamente cerrarse,porfin le quitaron la venda, su primera vista fue Lawrie,que tenía el pelo negro y estaba  con los brazos cruzados y con el ceño frundido.

-No me mires o seré lo último que veas.

A Draco le daba miedo esa persona, pero sin saber como  se sentía a salvo con Larry, al que giró a ver, era exactamente igual a su hermano, pero más amable y sonriente. Le dio una palmadita en el hombro.

-Bueno Draco, te voy a enseñar el lugar, ya que vas a vivir aquí...

Draco estaba perplejo.

-¿¡QUE?! ¿¡Cómo que vivir aquí?!

Lawrie se agachó a su altura.

- Pues sí mocoso a mí tampoco me alegra vivir contigo.

Larry le cogió de los hombros y le guió por la casa. Aprovechando que ya se habían alejado del resto, Larry intentó calmarlo.

-Si, a todos los que ves aquí nos pasó esto, menos al líder claro..., en fin, todos hemos pasado lo mismo que tú así que tranquilizate, te vamos a enseñar a usar varias armas, todos los nuevos aprenden el manejo de armas.

Draco preguntó:

- ¿Armas? ¿Qué es lo que hacéis con armas?

Larry intentó inventar una excusa ya que no se lo podía decir a tan temprana edad.

-Bueeeno, eso te lo diremos cuando crezcas, yo seré el que te enseñe. Obviamente eres muy joven para usar un arma así que te dejaremos un arma de paintball.

Larry le llevó a una sala con varias dianas.

-Vale, dispara.

Draco tragó saliva con algo de miedo, apuntó y disparó a la diana. Se podía ver la mancha de pintura justo en el medio. Larry le aplaudió.

-Muy bien! Sabía que se te daría bien esto, sin embargo...  Tendrás que pasar la mayoría del día en una habitación que se te asignará hasta que tengamos confianza en ti, está por aquí.

Larry le guió hasta su habitación y Draco se sorprendió al ver que la guitarra de su padre estaba ahí. Draco se giró hacia Larry y le preguntó:

-¿Me puedes dejar tocarla?

Larry le revolvió el pelo y le sonrió.

-Claro que sí, pasaré cada pocas horas a ver como estás, mañana seguiremos el entrenamiento. Adiós Draco.

Dijo esto cerrando la puerta y dejando a Draco sumergido en sus pensamientos...

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Fin! Comentadme que tal os pareció el cambio de rumbo en la historia. Probablemente esta semana suba otro capítulo, esto es todo, muchas gracias por el apoyo y adiós.

845 palabras.

El legendario caballero ¿En una mafia? \/Draco Brawl Stars Donde viven las historias. Descúbrelo ahora