3 años después...
𝐄𝐧𝐳𝐨
Me mire en el espejo de mi habitación de hotel y suspire. Los nervios llegaron a mi cuerpo una vez más, me sentía cómo la primera vez que hable con Matías, un saco de nervios.
Mire a Esteban y Pipe, quienes me miraban con una enorme sonrisa.
—Te ves increíble hermano —las manos de Esteban arreglaron el moño de mi esmoquin.
Pipe sonrió de una forma tierna —No puedo creer que mis amigos son señores casados literalmente —limpio una lagrima imaginaria de su mejilla.
Reí bajo —Pronto te tocará a ti casarte también eh.
Esteban y Francisco se habían casado hace varios meses atrás.
Mientras Pipe y Juani seguían con un hermoso noviazgo.
La puerta de mi habitación se abrió lentamente y visualice la imagen de mis padres —Hijo es hora —suspire emocionado.
"Me voy a casar"
Un año atrás...
—¿Amor estás seguro? —pregunte a Matías tomando su mano con fuerza.
Por fin, por fin había llegado el día, nuestro noviazgo lo haremos público.
Matías dio un apretón en mi mano —Osito, yo quiero que estés apoyándome en cada proyecto y yo quiero estar apoyándote en los tuyos —dejo un beso en mis labios —Además quiero dejar en claro que eres mío, solo mío Enzito.
Mi pareja y yo, habíamos hablado de hacer nuestro noviazgo público desde que comenzamos a vivir juntos, debido a la película de Bayona, nos hicimos mundialmente conocidos y se podrían enterar por terceros.
Ahora miren, estamos bajando del auto, hacia la alfombra roja de la nueva película de mi chiquito.
Su mano toma con fuerza la mía, caminamos juntos sin separarnos uno del otro.
El flash de las cámaras no paran, todos gritan nuestros nombres.
Suspire y mi mano soltó la mano de Matías para rodear su cintura y acercarlo a mi.
"Somos libres, podemos mostrarnos tal cual somos"
Camine hacia dónde sería la ceremonia y los recuerdos volvieron a mi cabeza.
—El señor Leonardo Marino a sido encarcelado debido a varios crímenes cometidos a lo largo de su carrera cómo productor —la reportera habló mirando la cámara.
Camino hacia mi donde me encontraba hablando con Esteban —¿Es verdad que el señor Marino agredió físicamente de ustedes durante el rodaje? —acerco su micrófono a mi.
Comencé a caminar lejos de donde estaban los reporteros, habían sido semanas duras, varias sesiones, denuncias y declaraciones en contra de ese señor. Y la prensa nunca se alejo, comenzando a perseguirnos para conseguir una nota al respecto de nuestras opiniones.
"Señores como ese hombre no deberían existir"
—A todos, lamento mucho —deje de escuchar las palabras del señor Marino cuando comencé a recordar los relatos de mi mejor amigo, los golpes y las amenazas.
Mi corazón comenzó a latir con fuerza cuando vi a mi futuro esposo entrar.
Debo admitirlo Francisco y Juani se esmeraron demasiado con la decoración del lugar.
