Salí temprano de casa con mama para comprar ir al súper mercado, y preferí dejar atrás lo sucedido, luces brillantes y pensamientos absurdos a la mierda, seguiré con mis cosas mi familia, estudios, mis amigos, fiestas, chicos sexys, salidas con mis amigos y demás, una vida normal, común y corriente como la de cualquier joven de 18 años.
Salimos del súper mercado y nos dirigimos a casa.
al llegar estaba mi apusto, sexy y lindo hermano mayor en el sofás viendo tv y con sus asquerosos pies sobre el sofás.
-Andrés!- dice mi Mamá mí hermano Con una mirada y un tono dulce- baja tus pies del sofássss. Gritó mi madre dejándonos a ambos inmovibles. Y si, mi mama es muy estricta con sus muebles ya que estos fueron traídos de Francia y pues casi que nos prohibe sentarnos allí. En fin, luego de unos segundos mi hermano le sonríe a mamá y se dirige a donde estábamos ambas.
-Los dos amores de mi vida- nos dice mi hermano acariciando nuestra mejillas y dándonos un beso en la frente a ambas. Mama y yo reímos
-Con eso no nos compras tonto. le dije riendo y dándole con el codo por el abdomen rodando los ojos.
Este me saco la lengua dándome la espalda y siguió viendo tv.
Hoy es sábado, no hay nada que hacer, y decidí llamar a Margareth para disculparme por dejarla sola ayer en la tienda de tatto.
Llamando a Margareth.
*Margareth -Bueno?
*Yo- Mí adorable Amiga del alma te llamó para disculparme por dejarte sola ayer es que tube un inconveniente y era necesario que regresara a casa.*Margareth- jajaja boba tranquila ya Esteban me contó todo.
*Yo: Ahh que alivio y que tal quedo mandame la foto por whatsapp
*Margareth: que te parece si mejor voy a tu casa, no estoy haciendo nada! En una hora estoy allá.
*Yo: jajaja vale te espero
Cuelgo
Bien, esta llamada a Margareth me hizo recordar lo que paso ayer, hize negación con mi cabeza y reprendi ese pensamiento.
***
Estaba dormida en mí cama mientras siento un gran peso en mí espalda.
-Despierta Bella durmiente- dijo margareth brincando sobre mi espalda
-Margoooo quitate de encima- me sentía sofocada y con el pecho apretado, margareth se enojó no le gusta que le llame margooo jajaja
-No me llames asi pequeña sabandija- me dijo cabreada
La mire soltando una carcajada- Muestrame tu Tatto.
Me lo muestra, y lo tiene en su ante brazo es bello tal cual como lo describí anteriormente
Y si, como pueden notar ya no se lo hizo en su espalda, margareth es muy indecisa desde de la conozco siempre ha sido asi, y bueno ahora su Tatto se encuentra en su brazo
-me encanta
- si? pues haste uno Yo buscare el diseño- me dijo Margareth guiñandome un ojo.
-Nah mis padres no me dejan
-Es enserio? ya eres mayor de edad puedes hacer lo que quieras- alzo los hombros.
-Si pero me da pereza hablar del tema con ellos- puse cara de desaprobación.
-Jajajaja bien- me dijo sacando la lengua.
Ahora que lo pienso seria mejor que le cuente a margareth lo que en realidad paso ayer. Siii ya se lo que estan pensando (prometí olvidarme de todo ) pero es difícil dejar todo asi-Margareth! solo alcanze decir eso cuando de pronto mi celular empezó a vibrar en mi mesa de noche.
*enserio quieres contarle a tu amiga? Ja! no deberías creeme.
Tu luz jajaja
Mis manos empezaron a temblar mire a Margareth con temor y me tire a la cama metiendo la cabeza
en la almohada.
-Karol que sucede?- escuche que dijo Margareth con una voz preocupante.
-Nada, no sucede nada
-Entonces porque estas asi? Revisare tu celular.
salte de la cama nerviosa y logre tomar mi celular pero ya era tarde, ya margareth estaba leyendo el texto.
-Que significa esto Karol? Que es lo que quieres contarme? y quien es esa persona que te escribió?- me dijo Margareth enojada y levantándose de la cama.
Me quede fría sin saber que decir. eran muchas preguntas, no sabría que responderle y sentí como una lágrima se derramaba por mis mejillas.
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Mistero de Luna Roja
Mystery / ThrillerMundo desconocido, tierra Jamás vista. Oh!!! donde estoy? quiero volver a casa. -Una historia de misterio donde Karol se encuentra atrapada en un mundo del cual jamas había oído hablar, Todo parecía estar envuelto en lo imposible, hasta que Karol s...