— oh no puedo creerlo — Dulce me toma de los hombros y me mueve — ¡Eso es tan... caliente y genial! — me grita emocionada, estamos almorzando nosotras dos afuera, debajo de un árbol rodeadas del bello color verde.
— veremos qué pasa, pero me siento un poco mal — le confieso y me llevo una cucharada de ensalada a la boca.
— ¿Mal por qué? ¿No besa bien? — me río.
— besa mucho mejor que un simple "bien" pero, es por Dean — pone los ojos en blanco y toma de su jugo.
— joder Ava, no es tu puto novio, él folla siempre que puede.
— no, Dul, no es eso, sabes que no le agrada.
— a ti tampoco y ayer te veniste en sus dedos.
— es diferente y ¿que pasará cuando Dean se entere?
— no pienses en eso ahorita, disfruta de los dedos de Rush y todo lo que te ofrezca, Dean no te ofrece eso — le resta importancia con una mano.
— ¿Que no le ofrezco? Le daría el mundo si pudiese — me atoro con la comida al escuchar a Dean.
— nada, estaba bromeando con ella, ¿cómo apareces de la nada? — la tranquilidad de Dulce cuando lo habla hace a Dean no indagar en el tema y sentarse frente a mi.
— nos avisaron que hay entrenamiento hoy, ¿te quedas? — me pregunta ignorandola.
— claro, no tengo nada que hacer de todas maneras.
— bueno, yo si, los dejo — Dulce me da un beso y saca su celular.
— ¿A dónde vas? La hora de almuerzo aún no termina — la freno.
— es que necesito ir al baño y además, la presencia de Dean me deja tan hastiada que si paso más tiempo acá terminaré vomitando — ahora sí se va mientras se ríe y Dean le saca el dedo medio.
— jodida niña de mierda — comenta Dean y lo veo mal.
— no le digas así.
— meh — le resta importancia, nunca se han llevado bien, o eso dicen, pienso que su manera de molestarse es su forma de interactuar — aquí hace buen clima, ahora entiendo porque prefieres almorzar en este lugar — asiento, aunque ahora vengo aquí para evitar a Rush, pero Dean no lo sabe.
— es mejor y no hay tanta gente.
— ¿Cuánto falta para nuestra próxima clase?
— unos veinte minutos, ¿por qué?
— lo suficiente para dormir — bosteza, tapo la ensalada que ya no quería seguir comiendo, abro las piernas y él se posiciona entre ellas apoyando su cabeza en mi pecho.
— ¿No dormistes tan bien ayer? — acaricio su cabello.
— ¿Quién no duerme bien contigo abrazándolo, bella?
— seguramente yo, debe ser una pesadilla — me sobresalto por la voz de Rush, ¿cómo es que me distraigo tanto para no ver cuando la gente se acerca?
— no estoy para tus mierdas Rush, habla estupideces cuando haya dormido lo suficiente — Dean cierra los ojos y yo levanto la cabeza para ver a Miller.
Sus ojos conectan con los míos y me guiña uno.
— ¿Por qué aún no te vas? — Dean se levanta un poco y Rush lo ve a él.
— el entrenador me mandó a buscarte, habrá una reunión justo ahora — se encoge de hombros y Dean gruñe.
— dile que no me siento bien.
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Dinastía
RomanceAva Connelly es la chica que muchas quisieran ser, su padre, Edward Connelly es el propietario de una gran industria empresarial, su madre, Mónica Harris, es una famosa chef con una cadena de restaurantes impresionantes. Ava, con 17 años, empieza a...