Sensibilidad

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16/03/90 s 5:26 AM

Alexander


Un largo tiempo solo estuve sin hacer nada, solo había regresado a mi casa por el momento, saque las llaves de mi casa para lentamente abrir la puerta y entrar. Apreté el interruptor para encender las luces solo para darme cuenta de lo solitario y desordenado que estaba, más sin darle importancia, atravesé la sala para llegar a mi habitación y poder recostarme en mi cama. Intentaba dormir mediante diversos medios, sin embargo, el insomnio no favorecía mi atención, únicamente me levanté de mi cama y procedí a caminar por mi casa. Suspire al ver a mi hogar en mal estado, el paso de los años y la falta de cuidado desde... Apreté mis puños y suspiré ante el doloroso, amargo y pésimo recuerdo, aunque aún me alejé de ahí todavía con sueño. Me acerqué a la cocina por un vaso de agua para intentar calmar mi sed mirando por la ventana, la madrugada y las estrellas. Finalmente, deposité el vaso en una pila de trastes agrupados y regresé a mi recámara. No tenía nada que hacer, pensar o siquiera arreglar para ese momento, como podría empezar todo de nuevo, hace un largo tiempo me había retirado y con sinceridad me parecía abrumador hasta cierto punto. Como podría continuar sin nada más, no hay más pistas, objetos o testimonios dado la hora, en cualquier lugar hay una pista, por más pequeña que sea...

Tras un par de minutos pensando con una almohada en mi rostro, pude recordar donde podría recopilar más información, el ayuntamiento. Quite la almohada de mi rostro y me dispuse a ir al ayuntamiento, tome las llaves de mi casa y mi abrigo para salir. Volví a caminar por las calles hasta una parada de autobús, me quede esperando un largo tiempo por algún autobús mientras miraba a las personas que concurrían la calle por cuestiones de trabajo o para madrugar. Solo me dispuse a recargarme contra la parada de autobús hasta que llego, subí al autobús junto a varias personas, pague 70 peniques y me senté en unos de los asientos del transporte esperando mi destino. 30 minutos pasaron hasta la siguiente parada, el autobús se detuvo y solo me dispuse a bajar de él. Levante mi vista para ver el letrero de mi parada, "Rivertown Heights" se leía en él. Continúe con mi camino a algunas cuadras al norte para llegar al centro. A pesar de la luz del amanecer, posiblemente podría intentar disfrutar de este día. Me encontraba en el vestíbulo de entrada del ayuntamiento, seguido por la recepción y una voz desde el mostrador para iniciar la conversación:

-Buenos días, ¿en qué puedo serle de ayuda? -Pregunto un gentil zorro de tras del mostrador.
-Buenos días, me gustaría solicitar información sobre una persona.
Me miro con curiosidad
-¿Tiene alguna identificación para proporcionarle lo que me pide? -pregunto el zorro con incertidumbre.
Quede en silencio unos segundos, saque mi cartera para buscar mi credencial, el zorro lo reviso con expectativa.
-Estoy buscando información sobre Mark Campbell, un tigre de aproximadamente 32 años, requiero cualquier registro relevante. -comente con prioridad.
-Por lo que veo tiene permiso para ver los archivos, lo único que requiero es que llene este formulario -Deslizo el formulario para que pudiera rellenarlo mientras se iba por una puerta.
Entonces solo rellené el formulario con las razones para requerir lo que pedía, de esta manera me quede con mi soledad de nuevo, me dispuse a observar el ayuntamiento con más detenimiento.
-Aquí tiene -Gire mi cabeza de nuevo hacia el mostrador para encontrarme al mismo zorro con una carpeta en sus manos.
Tome la carpeta con mis manos para ojear las hojas dentro de ella, tome la carpeta para guardarla en mi abrigo.
-¿Cuánto sería por los documentos?
-Sería 80 peniques, la información presentada es restringida al público y solo está reservada para autoridades, aunque hay ciertas limitaciones legales y regulaciones.
-Entiendo - Asentí levemente a la vez que pagaba la tarifa necesaria y salía del ayuntamiento para regresar a mi casa.
Finalmente, al llegar a mi hogar me dispuse a organizar todo para entregárselo al señor Henry, volví a hacer el mismo recorrido hasta llegar a la estación con documentos en mano. Saque la llave para la estación y abrí la puerta, al entrar fui directo hacia la oficina del señor Henry, gire la perilla de la puerta para entrar, pero para mi sorpresa él no se encontraba en su oficina, con molestia solo deje los documentos en su escritorio con una nota relatando levemente lo que contenía. Salí de la oficina y, antes de que saliera, un sentimiento de ver cómo se encontraba el sospechoso invadió mi cabeza. Me acerqué a la sala y, al entrar, pude observarlo, durmiendo plácidamente sobre la fría mesa. No hacía ningún ruido o movimiento, solo era él y yo en ese momento. Con cautela, me acerqué a él y, lentamente, me acerqué posicionando mis manos a unos centímetros de tocarlo. No parecía un peligro, aleje mi mano de él y simplemente salí de ahí, quizás solo me parecía...

Lindo...

Mark

Así estuve solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que yo lentamente abría mis ojos con cuidado, sintiendo la fría mesa del cuarto. Bostecé, dándome cuenta de que no había sido un simple sueño, con un suspiro comencé un nuevo día. Chequé el reloj de la habitación solo para ver que el tiempo pasó rápido, me limité a estar sentado, esperando y esperando. Algunas pisadas se acercaban a la sala, el sonido de las llaves y la puerta abriéndose para encontrarme con un lobo de pelaje gris en la entrada de la puerta.

-Buenos días -hablo con un tono marcado.
-Buenos días -respondí al saludo.
El contrario solo me observo unos segundos antes de volver a hablar:
-Por lo visto, cuentas con un historial decente, algunos documentos y registros respaldan eso -inquirió con intriga mientras ponía un documento sobre la mesa con una foto mía.
-¿Tienen todo? - pregunté con sorpresa, más, sin embargo, no recibí respuesta, pero sentí que en parte era verdad.
Él abrió la carpeta ojeando las hojas.
-Por el momento seguirá la investigación, aún se debate si deberías ir a juicio, aunque por la falta de antecedentes penales es algo probable; sin embargo, el hecho de cometer un asesinato es un delito grave que generaría un registro criminal, por lo que es más probable que suceda un juicio.
Yo callé, la situación no mejoraba para mí, empecé a sudar frío, pero aun manteniendo mi postura

Esto recién comenzaba...


𝙰 𝙼𝚒𝚍𝚗𝚒𝚐𝚑𝚝 𝙼𝚢𝚜𝚝𝚎𝚛𝚢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora