Muchas cosas salen de un encuentro, muchas cosas efimeras se sienten en visiones instantaneas pero que pasa si el encuentro logra crar cosas sempiternas, unos sentimientos sin final... ¿o si tienen final?
Una historia entre Masumi y Naruto, en la qu...
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En una noche serena, donde la luna se erguía majestuosa entre las rocas y las hojas caían danzando al compás del viento, y las estrellas resplandecían con intensidad, ocurrió algo extraordinario. Fue alrededor de las 22 horas cuando la luna alcanzaba su máximo esplendor y el viento refrescaba el ambiente, que se escuchó un llanto: Masumi Hanami había llegado al mundo terrenal. El viento soplaba suavemente para acunar a la bebé, las hojas cesaron su danza para observar a la pequeña Hanami, y la luna concedió que la niña fuera el centro de atención de la noche.
Dentro de una cabaña iluminada por velas, se encontraba Jin Hanami, la señora del clan, en el proceso de dar a luz a su pequeño rocío, fruto de un amor grande e inolvidable que aún perdura. Luchaba con todas sus fuerzas por conocer al ser que había llevado durante nueve meses. A su lado, Asahi Hanami, el Regente del clan, velaba por su esposa y su futura hija, asegurándose de que no enfrentaran ninguna dificultad.
A las 22:34, comenzó a oírse el llanto de una bebé, un rayo de bendición para los señores Hanami. Como fruto de su amor, dieron la bienvenida a Masumi, cuyo nombre significa 'pureza verdadera', y que prometía traer consigo un viento de paz y tranquilidad.
Jin y Asahi apreciaron a la pequeña delante de sus ojos, una niña de cabello castaño claro con sus puntas lilas, características del clan, y con sus pequeños ojos casi cerrados se apreciaba un toque lilas, idénticos a los de su madre. La bebé se veía tan pequeña que con sólo cargarla daba la sensación de que se podría romper, pero al final, Masumi Hanami era el mayor tesoro de Jin y Asahi Hanami.
Tres años después...
En los campos verdes fuera de la casa monárquica, se encontraba una bella niña danzando con el viento y girando como los lirios en el pasto. Masumi sentía la naturaleza en todo su cuerpo, desde el pasto en sus pies descalzos, el viento jugando con las hebras de sus cabellos, hasta el sol acariciándola con audaces rayos.
La pequeña Hanami aún no era consciente de la gran conexión que tenía con la naturaleza, de cómo sentía la vitalidad de las cosas con tan solo tocarlas, pues ella pensaba que esas pequeñas cosquillas que sentía eran a causa del amor que le tenía a la naturaleza. Pero sus padres sí eran conscientes del gran poder que tenía; sus ojos aún no despiertos lograban salir a flote con pequeñas acciones, sobre todo Jin, quien era consciente de que su hija, su adorado tesoro, sería la mejor y más grande portadora del Bijutsugan. Masumi Hanami marcaría un antes y un después cuando despertara tal poder.
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Holi, holi. ¿Cómo están? Les presento mi primera y tal vez última historia convertida en Fanfic. Realmente decidí empezar con este género, pues me permitiría aprender a seguir una historia, la trama, la creación de personajes y sobre relaciones y personalidad. Con Fika, espero cumplir mis niveles de escritura estipulados para mejorar. Espero que les guste y disfruten de su creación.
Dejenme saber si les gusta la historia, puede ser con comentario o votos, jiji.
