Capítulo 1: Mírame como solías hacerlo antes.

143 10 0
                                    

—¿Bebé?

—¿Mm?

—¿Sabes? Los chicos... hicieron un plan para ir al club de drags que acaba de inaugurarse hace poco y del que todo el mundo habla. ¿Quieres... ir?

La chica ojiazul detiene su labor en su portátil un instante, todavía sin mirar a su novia.

—Cariño, sabes que no soy fanática de las multitudes ni de los retumbantes ruidos electrónicos que hacen pasar por música.

—¡No! No, no, ahm, en realidad tienen buena música, y estaríamos en una zona privada porque JoJo conoce a una de las drags —se apresura a explicar la rubia de ojos cafés.

Un suspiro se escucha en la habitación.

—Cariño, lo siento, debo terminar esto —trata de excusarse la castaña. Se pierde el ceño fruncido que recibe como respuesta inmediata.

—¿No puedes acabar después? Deberías tomarte un descanso, llevas dos horas pegada a esa pantalla.

—No necesito un descanso, necesito terminar esto.

De nuevo, la ojiazul se pierde la mueca de su novia, esta vez una expresión de dolor ante la rudeza de su timbre de voz.

—Sí. Lo entiendo. Yo solo... Pensé... —Fue su turno de suspirar, sabiendo que sería una batalla perdida. Resignada, se decanta por murmurar—: Olvídalo.

Esa noche la rubia se va con sus amigos. La castaña se queda en el departamento.

No me dejes irDonde viven las historias. Descúbrelo ahora