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Aquel rubio alto entro en la habitación y saco al contrario de sus pensamientos, sin decir nada se sentó junto a este mismo de igual manera que el
El silencio no era incómodo en lo absoluto, el rubio se mantenía sereno y el peli-verde se mantenía pensando
No pasaron muchos minutos para que aquel rubio alto de ojos azules rompiera el silencio que los rodeaba
— ¿Que es lo que tanto te preocupa, marimo? — le pregunto y al igual que esté mismo tenía sus ojos en dirección hacia el suelo —
— ...No lo sé... — contesto sin más, su voz sonaba decaída —
— Zoro... Se que estás preocupado, pero me eh dado cuenta de que no has comido nada — hablo con voz notoriamente decaida — Ademas te algo no lo se ¿Confundido? — se podía ver la preocupación en los azulados ojos del rubio — Sk no quieres hablar ahora lo entenderé, pero estaré aquí si-
— No...Si quiero hablar — respondió seriamente — Pero no aquí — la mirada del peli-verde se poso en el rubio menor que se encontraba recostado y durminedo plácidamente —
El mayor entiendo a lo que el contrario se refería, sin más se levantó del suelo y tendio su mano en accion de ayuda hacia el de ojos enegrecidos
Este, aunque algo dudoso en si aceptar o no, al final acepto la ayuda del otro. Ambos se dirigieron a otra habitación
Algo más aislada que las demás, para poder hablar si ser escuchados o interrumpidos
Ya en la habitación el espadachín estaba dudoso de su contar sus preocupaciones y miedos al otro, al final optó por hacerlo dejando su orgullo de lado
Después de todo...
¿Cuando se iba a presentar otra oportunidad así?
Donde alguien lo escuchará y resolviera sus dudas, sus preocupaciones, sus miedos
