Yo cumplo mis promesas (YEWOOK)

Yo cumplo mis promesas Parte 5

Al llegar al bosque de la ciudad se podía ver muchos puestos y música de todo tipo, instrumental, baladas etc. Sus fosas nasales se inundaban del olor a comida tradicional japonesa, mexicana, italiana y de frituras, era muy colorido y bonito.

El azabache observaba el rostro de su amado, le gustaba ver ese brillo en sus ojos, se le veía emocionado, así que se pensó las cosas, algún conocido de su trabajo podría verlo, pero le restó importancia, quería disfrutar esa noche con Ryeowook como lo que eran, una pareja, así que paso su brazo por su espalda y acomodo su mano en su cadera, el pelirrojo al sentir el contacto trato de alejarse, ya que él también era consiente de que alguien podría verlos, pero le fue inútil tratar de zafarse del abrazo de Kim ya que aumento la fuerza y no se lo permitió, el ojinegro se acercó hasta su oído para susurrarle

-mm ¿Quieres algo de comer?, hoy te complaceré todo tipo de antojos- mordisqueo su lóbulo produciendo un cosquilleo en su vientre

-no deberías estar tan cerca ni hacer ese tipo de cosas en público, alguien conocido podría vernos y...

-Eso no fue lo que te pregunte- volvió a mordisquear su oreja
-mm por lo otro realmente no me importa, así que relájate- Ryeowook solo se sonrojo un poco y se dejó hacer - Dime que quieres cenar hee? Mm no me digas que te vas a hacer de la boca chiquita que ambos sabemos que lo último que tienes es una boca chiquita- con malicia pregunto nuevamente a su chico dándole un leve apretón en el trasero

-Eres un pervertido- volteo su cara roja por las fuertes y por qué negarlo verdaderas declaraciones -vamos al puesto de comida integral se me antojo una ensalada- sin mirar a su acompañante emprendió la marcha

- hey espérame mm no me digas que ya andas de antojo jajá- rió por lo bajo -pero cómo si ni siquiera lo hemos hecho ¿Haa?, bueno no como se debe- enarco una ceja haciéndose el ofendido

-si serás idiota, camina que tengo hambre- le volteo el rostro -tsk maldita cacatúa como se ponía a decir disparates- pensó el bermejo

Una vez que llegaron al puesto de comida integral tomaron asiento en las mesitas dispuestas por el local ambulante, tomaron sus pedidos, una ensalada griega para el bermejo y para Yesung una cesar con jitomate extra, esperaron unos minutos y comenzaron a degustar su comida, el ambiente era magnifico, al quedar algo apartado de los puestos de comida chatarra no se veía mucha gente, el clima era fresco y la música agradable, debía reconocer que le estaba agradando esa pequeña velada con Kim. Terminaron sus cenas, el azabache desembolso el dinero y la propina y siguieron caminando recorriendo los puestos de juegos, de artesanías y libros, se pararon en algunos a comprar una que otra baratija y el oji noche compro un pequeño detalle para su novio.

-Cierra los ojos mapache- dijo con sus brazos detrás de su espalda para ocultar el obsequio

- ¿Qué tramas hee?- achinando sus ojos el taheño preguntaba a su morocho travieso

-anda no seas tan desconfiado, solo ciérralos- sonreía aún con sus brazos detrás de su espalda

- si lo soy, además que te pico estas muy extraño- levanto una ceja, no se creía lo que veía, un Yesung sonriente (más de la cuenta, porque cuando estaba con él, solía sonreír más, pero ahora se le hacía magistral)

-bueno también puedo ser agradable sabes, pero solo con las personas preciadas para mí- le sonrío con los ojos cerrados, los volvió a abrir - anda ciérralos-

No le quedo de otra y cerro sus ojos, sentía algo de ansiedad, que tal si ese desgraciado le estrellaba un huevo en la cabeza o le echaba algo dentro de su ropa, empezaba a desesperarse, se estremeció al sentir algo suave rozar su mejilla, dio un paso atrás