Janna llegó a su hogar después de un día intenso en la pista de patinaje. Al abrir la puerta, fue recibida por la cálida bienvenida de Max, su leal compañero golden retriever. La cola de Max se movía frenéticamente, expresando su alegría al ver a su dueña.
- ¡Hola, Max! ¿Cómo estuvo tu día? - saludó Janna mientras acariciaba la cabeza de su peludo amigo.
Max respondió con ladridos entusiastas, como si estuviera contándole sobre sus propias aventuras en el hogar.
Janna caminó hacia la sala de estar, donde solía compartir el espacio con su mejor amiga, Andrea. Sin embargo, ahora el lugar estaba más tranquilo desde que Andrea se habia mudado con su novio.
- Es solo tú y yo ahora, ¿verdad, Max? - comentó Janna mientras se dejaba caer en el sofá. Max la miró con ojos llenos de lealtad, listo para ofrecer su compañía.
Janna se sintió agradecida por tener a Max a su lado.
- Bueno, al menos no estoy completamente sola. Tú siempre haces que regresar a casa sea especial.
La casa, aunque tranquila, estaba llena de recuerdos compartidos con Andrea. Janna recordaba las risas, las conversaciones y la alegría que solían llenar cada rincón. Ahora, con su amiga viviendo en otro lugar, Janna se enfrentaba a la nueva realidad de vivir sola.
Después de un momento de reflexión, Janna sonrió.
- Pero no importa. Aún tengo a Max y, por supuesto, al hielo.
La mirada de determinación en sus ojos reflejaba su amor por el patinaje sobre hielo y la compañía de su fiel amigo.
Max, como si entendiera cada palabra, se acercó y apoyó su cabeza en el regazo de Janna, ofreciéndole consuelo silencioso.
Janna suspiró y acarició la cabeza de Max.
- Gracias, amigo. Al menos siempre puedes contar conmigo para patinar contigo y llenar este lugar con nuestras propias aventuras.
Javi y Eric se encontraban en la penumbra de su habitación, cada uno sumido en sus propios pensamientos después de un día lleno de sorpresas y tensiones. Mientras se preparaban para dormir, Eric rompió el silencio con una observación inesperada.
- La cara de Janna se me hace conocida - dijo Eric en voz baja, su tono pensativo resonando en la habitación.
Javi, quien estaba aún molesto por la situación en la pista de patinaje, respondió bruscamente:
- ¿De dónde la vas a conocer si es un cero a la izquierda?.
Eric suspiró, sintiendo la frustración de su hermano.
- Javi, no digas eso. Deja de ser tan cabezota.
Javi se revolvió en su cama, incapaz de dejar de lado su enojo.
- Mañana le diré cuatro cosas. No puedo creer que nos haya prohibido entrar a la pista.
Eric se sentó en la cama y le puso una mano en el hombro a su hermano.
- Deja a Dafne y Janna tranquilas, Javi. Mañana tenemos una entrevista importante. Necesitamos estar concentrados en eso.
Javi suspiró, sintiendo la tensión en sus hombros disminuir lentamente. Sabía que Eric tenía razón, pero aún le costaba dejar de lado su orgullo herido.
Finalmente, Javi apagó la luz y se acomodó en la cama.
Con la mente puesta en la entrevista del día siguiente, los hermanos xbuyer se sumergieron en un sueño inquieto, esperando que el nuevo día trajera consigo una nueva perspectiva y oportunidades para resolver sus conflictos.
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ENAMORÁNDOME DE JAVI
Teen FictionLos hermanos conocidos como xbuyer, famosos por su liderazgo en la Kings League, llevan vidas llenas de responsabilidades y éxito. Sin embargo, todo cambia cuando su entusiasta sobrina Dafne expresa su deseo de aprender patinaje sobre hielo. Dispues...