Tenía mi restaurante, por fin había cumplido mi sueño, lo tenía todo en la vida.
Todo empezó cuando tenía memoria, siempre supo mi madre que triunfaría tarde o temprano, ya que siempre me ayudo en todo del tema de la cocina y se lo debo todo.
Empece a observar por horas y horas a mi madre en la cocina como cocinaba, luego de eso comencé a estudiar, me quise reflejar en de lo que trabajaba mi madre que era administrativa fiscal porque estaba un poco perdido, pero al 3 año de carrera ya me estaba agobiando y sentía que me estaba perdiendo en un pozo sin fondo, hasta que mi dulce madre, me animo a estudiar lo que la verdad era mi pasión, ser cocinero.
No me freno nada, solo que mis padres no tenían el suficiente dinero para una segunda carrera y mi hermana pequeña iba detrás de mi y también sabía que la tenían de cuidar, así que me fui a pedir un préstamo al banco por la carrera de un año que iba a hacer en Barcelona. Me matriculé, y ahí fue uno de los mejores años de mi vida, aprendi mucho, hice las prácticas en un restaurante de Barcelona "El Disfrutar", ayudé muchas veces a mi madre también a perfeccionar sus comidas, nos pasábamos horas juntos en la cocina y yo le iba diciendo que haría y ella a veces me reñía cuando me pasaba mucho de sal y no se podía ni comer el plato pero eran nuestros momentos, únicos con ella y me encantaban.
Una vez finalice el curso, me fui a vivir un poco lejos de mi familia durante 2 años, en Manchester, mi cocinero favorito abrió un restaurante catalán ahí con uno de sus socios un tal "Pep Guardiola" creo que se llamaba así no me acuerdo mucho y ahí fue que conocí a mi mejor amigo, Fermín.
Fermín me sacaba 2 años, pero a veces parecía yo el mayor por la mentalidad de la creatividad de la cocina y él que solo me decía que si, de carácter somos muy idénticos, pero yo le echo muchas broncas de vez en cuando porque me gusta mucho que todo salga bien sino me cabreo.
Pero yo quería más, y me despedí de el sabiendo que nos veríamos por Barcelona cuando él bajaba o cuando lo fuera a visitar alguna vez, sabíamos que no era la última vez que nos veríamos.
Seguí mi camino y me fui a hacer las prácticas de 6 meses "El Celler de Can Roca" en Girona, y de ahí me cogieron directo. Duré 6 meses más y con 23 años cuasi 24 me cansé. Quería más, mucho más, durante los últimos meses en el celler, estuve poniéndome en contacto con Ronald el mejor amigo de un amigo mío de Barcelona y él conocía a Frenkie.
Quedamos una vez los tres para hablar, lo teníamos muy claro, queríamos montar algo grande en el centro de Gracia de Barcelona.
Lo teníamos todo, Ronald era el sommelier de los vinos, Frenkie el que le ayudaba en sala y el contable fiscal de la empresa y yo el cocinero, nos faltaba el capital para montar la sociedad.
Pero el problema no era el dinero, el problema es que necesitábamos a alguien más en cocina, y ya era una cocina pequeña para dos personas. Puse claro que necesitaba a alguien que me comprendiera mi carácter, mis broncas y que haya conexión sino fuera. Ahí di el clavo, me faltaba Fermín, el problema era que tanto Frenkie y Ronald ya habíamos dejado claro que seríamos 3 socios y no lo conocían para nada.
Mi madre siempre dijo que tenía un don a parte de la cocina, hacer que la gente lo que le dijera lo creyera.
Así fue, como los convencí de introducir a Fermín, pero primero le tenía de hablar del proyecto y del dinero y de todo.
Una llamada, una visita, 30 minutos, y Fermín era el 4 y último socio de este nuevo restaurante de Barcelona.
El préstamo cada socio puso lo suyo, yo no tenía para nada ahorrado de mis últimos años, ya que me embarqué en este sueño a la locura sin pensar-lo mucho, lo que no me esperaba era que mis padres me lo dieran. No pude dejar de dar-les las gracias durante mucho tiempo, y hoy en día sigue totalmente agradecidos con ellos pero sobretodo nunca me olvidaré de las palabras de mi madre
"El restaurante puede ser pequeño, pero tu visión es lo más grande que he visto en toda mi vida, te quiero mucho por favor nunca lo olvides"
Y así fue como lo tuve todo, un nuevo restaurante en el centro de Gracia de Barcelona.
Restaurante "Insolent", 4 socios desvergonzados de la vida pero sobretodo descarados por todo.
Bueno dije que mañana comenzaría a actualizar pero ya he empezado!
Mañana tendréis el extra de mala vida junto con un capítulo nuevo de Mi luz!
Espero que esta historia también os guste tanto como las otras.
Repito esta historia irá más lenta que el one shot y será narrada por Pablo todo el rato!
Nos leemos pronto!
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Odnoliub
RomansaRealmente siempre dije que mi único y verdadero amor era la cocina y mi creación por la comida. Que equivocado estaba