Viviendo con el secreto de mi vida (1)

Capítulo 9

Basil 

Pasé varias horas pensando, dice que me gusta, Binna. Tuve que explicarle todo, pero primero tenía que ir a casa de Sofía para aclarar esta mierda. Tomé mi llave del auto de mi amigo y fui a su casa.

—¿Qué se supone que pasará en tu maldita vida, Sofía? no siempre uses protección contigo

—Estoy embarazada, estoy esperando ese bebé, es tuyo... está bien, dijo arrepentida. — Pasé por tu mansión en Park y te vi besando a ese frío idiota de la hijastra con tu madrina.... ¡¿Cómo quieres que me quede contigo para no ponerme celosa?! tu estas contigo Basil!

—¡Por supuesto que esa fue la única condición para separarnos después de que naciera mi hijo! Sólo nos acostamos juntos una vez y quiero que sepas por qué arruinaste una relación seria. Si ese bebé siempre solo llamaba para ayudarme, no nos queda nada más.—Dije saliendo sorprendido y furioso.

Tomé mi teléfono y encontré muchos mensajes de texto de Do-yun y Ares.

Ares

hermano, estoy en la mansión de Park, esperando a tus amigos.

Do-yun

amigo no tengo donde ir mi auto

espérame en la casa

Ares

todavía estoy aquí

Conduje hasta la mansión y antes de llegar vi a Ares sentado frente a la silla del jardín de la mansión.

Estacioné y salí, dándole un apretón de brazos y entraron a la casa. Nos sentamos los dos en la cocina y le conté a Ares todo lo que había pasado. Me aconsejó que hablara con Binna, que está casada con Do-yun, y se lo explicara con calma.

—Lo sé, me di cuenta de eso, amigo.

Ares estaba actuando y empezando a hablar cuando entró Binna. Parecía muy torpe y tenía fiebre alta, lloraba y se tapaba la cara.

—Binna, soy Ares Mayorga así que soy medio hermano, ¿podemos hablar hermana?—se detuvo y se paró frente a mí.

—¿Qué quieres que hable de mi matrimonio con Do-yun, hermano?... De cómo dijiste que te gustaban y te acostaste con otra chica? ¿O tal vez también quedaste embarazada? Si eso es lo que creo, te ahorraré el problema y no volveré a hablar nunca más  —dijo gritando y llorando. Subí a la habitación y escuché algunos ruidos afuera de su puerta.

  —Amigo, voy a hablar con ella— dijo Ares y yo solo asentí.  —Sé que no sabemos mucho, pero tal vez sea mejor si está cansada.

Binna

Me encerré en mi habitación y me desmayé en mi cama, cuando terminé me desperté y escuché un golpe en mi puerta.

—!DÉJAME INSISTIR, BASIL! ¿No voy a abrirlo?

— Por suerte no soy Basil. — dijo su amigo en tono de broma — Soy Ares, hermana, ábreme pequeña, llevando el agua caliente y un paquete de medicinas.

 — Pásame —  dije en un tono tranquilo..

  —Binna.  —Dijo acercándose a donde estaba recostada, corrí al baño a vomitar hasta salir de allí—disculpe, vamos, sé que nos conocemos...

Soy Ares.  Basil me contó lo que pasó. 

Sofía está muy embarazada de él, solo bromeaba con verlos juntos, solo una condición para separarse después del nacimiento de ese bebé, lo demás, Basil ya está con ella, le gustas — dijo con una sonrisa.

Lo dije con tanta honestidad y tranquilidad que decidí creerlo. 

Todos merecemos una segunda oportunidad.
Asentí y entendí lo que había sucedido, en la forma en que me llevaría a casa.

—Dile que ya entendí al idiota frío, grosero e incomprensivo, pero que tu marido que lo permita, tendrá que trabajar más duro por tu matrimonio, perdónalo.

—Está bien, hermana — dijo Ares, decidiendo sonreír.  —Creo que iré, buena suerte 🍀—me dije gracias guiñando un ojo con orgullo.  Ares tropezó con algunos de mis zapatos y terminó en el suelo.  Fruncí el ceño cuando bebió el agua con la pastilla que estaba debajo de mi cama.

mierda de carajos.

—¿Qué significa eso?  ¿Es tuyo?  —Estoy confundida—siempre me siento, no quiero arruinar su relación, pero si de algo estoy seguro es que Basil es responsable de eso y nunca lo sé.  No sé cómo olvidarme de usar condón.  Pero bueno, habla con él, no diré nada.

—Gracias hermano Ares.  Lo levanto y respondo con un poco más de calma.  De momento me haría la prueba, pero ahora estaba más tranquilo de lo que decía Ares.